¿Que aporta la responsabilidad social a su empresa?

De la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) no hay actualmente ninguna definición comúnmente aceptada ni ninguna institución internacional con el poder de desarrollarla. Consecuentemente, la RSC puede significar y significa diversas cosas a diversa gente (Hohnen, 2005). Tomemos por ejemplo, la dada por AECA (2004, p.21) en España que define la RSC como “el compromiso voluntario de las empresas con el desarrollo de la sociedad y la preservación del medio ambiente, desde su composición social y un comportamiento responsable hacia las personas y grupos sociales con quienes se interactúa”, que “centra su atención en la satisfacción de las necesidades de los grupos de interés”, y que “va más allá del mero cumplimiento de la normativa legal establecida y de la obtención de resultados exclusivamente económicos a corto plazo”.

El estudio que acaba de publicarse, realizado por Economist Intelligence Unit (2005) se preguntaba sobre la importancia de la RSC a un total de 136 directivos de compañías de varios países y 65 inversores. El 85% señalan a RSC como una consideración «central» o “importante” en sus decisiones en materia de inversión,, frente al 44% de hace cinco años demostrando el crecimiento en la importancia de la RSC.

En cinco años, casi se dobló este porcentaje, haciéndose realidad lo que vaticinó Carrasco (2001, p. 47).»los ciudadanos del siglo XXI irán demandando cada vez con mayor vigor, la idea de que las únicas actividades empresariales admisibles son aquellas compatibles con el desarrollo sostenible», aunque “el conocimiento y el grado de implantación de la RSC va a depender directamente de la divulgación y reconocimiento público otorgados a las mejores prácticas” (Lizcano y Moneva,2004).

En España, el informe de Forética, (Granda y Silos, 2004) sobre la propia percepción que las empresas tienen sobre la RSC, arroja que un 49% de las empresas considera que las prácticas de RSC son relevantes para el éxito de su negocio.

Este dato contrasta, es pequeño, si lo comparamos con el aplastante 84 % de los encuestados por Economist Intelligence Unit que consideran que la RSC, puede ayudar a la compañía a mejorar sus resultados. Dato que nos debe hacer reflexionar sobre la importancia que está adquiriendo la RSC.

Asimismo, coincidimos con Larrinaga (2003, pp. 72-73) al pensar que “aunque el público atienda en primer término a las responsabilidades de aquellas corporaciones que tienen impactos sociales o ambientales más obvios, no ha de olvidarse que el concepto de responsabilidad social también es aplicable a las pequeñas y medianas empresas” (PYMEs) . Las PYMEs son la mayoría de las empresas que conforman el tejido empresarial de un país y visto el aumento de importancia que está asumiendo en el conTEXTo global la RSC, conviene que las pequeñas y medianas empresas, vayan acercándose al concepto de RSC.

Por eso queremos resaltar en esta primera entrega para el boletín de DEPROIMCA, que para lograr la RSC, una PYME, necesita como paso previo, alcanzar una cultura empresarial basada en valores. Precisamente para su logro destacamos los siete pasos para necesarios para el cambio hacia una cultura que promueva y recompense comportamiento ético (Navran (2003). Las siete etapas son:

1. Posición, filosofía o creencia de la empresa: La empresa debe anunciar la adopción formal de valores fundamentales que quisiera que sus empleados asumieran. Se pretende integrar e identificar a toda la organización y su aplicación por todo el personal.

2. Crear sistemas de organización formales: La empresa creará e implementará sistemas formales, procedimientos y políticas que definan explícitamente las expectativas respecto a los comportamientos de los trabajadores en su trabajo cotidiano (declaraciones de valores, de códigos de conducta, de políticas de ética, de mediadores, de comités de seguimiento de la ética, encuestas …).

3. Comunicar las expectativas a través de sistemas informales: La comunicación a toda la empresa respecto al comportamiento deseado por toda la organización, se hará mediante el ejemplo: uso visible de valores éticos.

4. Refuerzo de la política a través de medidas y de recompensas: La empresa debe promover pautas y políticas asociadas al “cómo se mide” y recompensas al éxito de la aplicación de las mismas.

5. Implementar comunicaciones y estrategias educativas: Para asegurarse de que el personal de la empresa entiende la posición adoptada respecto a la RSC y las expectativas del comportamiento deseado, así como sobre la familiaridad con los nuevos sistemas y estructuras que se han implementado, para facilitar su cumplimiento.

6. Utilizar la respuesta a los acontecimientos críticos: Para inculcar al personal la filosofía adoptada, los directivos asumirán su posición explicitamente y utilizarán el acontecimiento crítico como evidencia de que los niveles más altos de la organización son responsables de los estándares adoptados.

7. Evitar ocultaciones: Un punto crítico son las opiniones de los empleados acerca de los motivos que provocan la adopción de la nueva filosofía. Los directivos evitarán cualquier acción que podría razonablemente malinterpretarse, aclarando a toda su organización su posicionamiento.

Conviene recordar, que el estudio realizado por Economist Intelligence Unit, la transparencia, es para el 68 % de los inversores, el factor más importante a considerar, y es que la “la responsabilidad social de las empresas tiene una vertiente ligada a la transparencia y a la obligación de difundir informaciones relevantes y fiables”, (Rivero, 2003, p.37).

La situación actual, es clara: la RSC está en auge, y desde la ONU hasta la OCDE, entre otros organismos, se esfuerzan en potenciarla, y esta tendencia sobrepasará, en un lapso breve de tiempo, a la gran empresa, para alcanzar a la PYME y convertirse en un tema de preocupación para las Pequeñas y medianas empresas de todo el ámbito global. Conviene prepararse desde ahora, adelantarse a los acontecimientos, tanto por los beneficios demostrados en la reputación, como en los resultados positivos que para la empresa reporta asumir este comportamiento beneficioso para todos. Varios estudios avalan la afirmación que las empresas socialmente responsables, se benefician de esta actitud, entrando en un circulo virtuoso: así las compañías exitosas gastan más en RSC porque pueden permitírselo, y su vez los resultados financieros les ayudan a ser más exitosas. Su empresa puede ser una de ellas.

Bibliografía consultada:
ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE CONTABILIDAD Y ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS (2004): Marco Conceptual de la Responsabilidad Social Corporativa. Documento AECA
CARRASCO, F (2001): «La relevancia social de la contabilidad medioambiental». Revista AECA, nº 56. p. 46-47.
CASTROMÁN DIZ J. L. Y PORTO SERANTES, N. (1999): «La responsabilidad social de la empresa: Impacto social, comportamiento empresarial e información pública», XIII Congreso Nacional y IX Congreso Hispano Francés, AEDEM, Logroño, p. 471-477
GRANDA, G Y SILOS, J. (2004): Informe 2004. Responsabilidad Social de las Empresas. Situación en España. FORÉTICA, http://www.foretica.es
ECONOMIST INTELLIGENCE UNIT (2005): The importance of corporate responsibility. http://www.oracle.com
HOHNEN, P. (2005): «Can corporate social responsibility survive 2005?», Ethical Corporation, 24 January 2005. http://www.ethicalcorp.com.
LARRINAGA GONZÁLEZ, C. (2003): “Responsabilidad Social Corporativa”, Revista AECA 64, p. 71-73.
LIZCANO, J. l. y MONEVA, J. M. (2004): “Marco conceptual de la responsabilidad social corporativa”, Revista AECA 68.
NAVRAN, F (2003):“Seven steps For Changing The Ethical Culture Of An Organitation”, Ethics Today on line, vol. 1, issue 6, february. http://www.ethics.org/today/et_v1n60203.html
RIVERO LUENGO, P. (2003): “Responsabilidad Social Corporativa. Un nuevo modelo de Gestión y Medición para la Empresa” Revista AECA 64, p. 35-37.