Conociendo al MERCOSUR: Brasil

Brasil es sin lugar a dudas el país más importante del Mercosur, por su tamaño demográfico y económico y, por lo tanto, el país con relación al cual hay que analizar con mayor detenimiento las amenazas y las oportunidades que podrían tener lugar como consecuencia del establecimiento del libre comercio que se generaría a partir de la adscripción de Venezuela dicho pacto subregional.

Una primera cuestión que es importante tener en consideración es que Brasil es un país con una agresiva política de promoción de exportaciones, lo cual lo ha llevado a elevar el monto de sus ventas externas desde un nivel de 50 mil millones de dólares en 1998 a un nivel de 72 millones de dólares en 2003. Se trata de un incremento de 44 % en el breve plazo de 5 años. Las exportaciones hacia Venezuela, sin embargo no han crecido en ese período, sino que han disminuido, pasando desde un monto de 749 millones de dólares en el 2000, a 1090 millones de dólares en el 2001, para caer sucesivamente en los años 2002 y 2003, alcanzando este último año la modesta cantidad de 604 millones de dólares. Eso ha significado que Venezuela no sólo no ha sido un socio comercial de importancia en el periodo de mayor expansión de las exportaciones de Brasil, sino que ha disminuido su importancia como país de destino de las exportaciones brasileñas, captando en ese último año un escaso 0.8 %de las mismas, después de haber recibido el 1.9 % de las exportaciones de poderoso vecino en el año 2001. Este hecho tiene muchísima importancia en el presente, pues es dable suponer que, aun sin modificar una sola letra de la normativa comercial vigente hasta el año 2003, la recuperación económica de Venezuela podría significar para Brasil un incremento de sus exportaciones cercano a los 400 millones de dólares, es decir, un aumento de casi 70 % sobre el nivel del 2003. Con una normativa comercial más liberal, como la que es dable esperar con la incorporación venezolana al Mercosur, esas ventas brasileñas pueden legítimamente aspirar a crecer más aun.

Las importaciones totales de Brasil han disminuido desde 60 mil millones de dólares en 1998 a 50 mil millones de dólares en 2.003, lo cual le ha permitido a Brasil operar con un creciente superavit en su cuenta comercial. Las importaciones brasileñas provenientes de Venezuela, a su vez, han bajado desde los 833 millones de dólares en 1.998 a un modesto nivel de 303 millones de dólares en el 2003, pasando por un monto de 1.400 millones de dólares en el año 2.000. Esto significa nuevamente que una recuperación económica de Venezuela, que tenga como causa o como consecuencia un incremento en su capacidad para exportar, puede encontrar en Brasil un mercado ya anteriormente conocido donde es posible colocar un nivel de exportaciones 400 % mayor que el actual, aun con la vieja normativa comercial.

Es decir, la sola recuperación de los niveles comerciales ya conocidos anteriormente aparece en el presente como una meta de gran trascendencia cuantitativa tanto para Venezuela como para Brasil. Con mucha mayor razón aun, aparece como atrayente el poder incrementar los niveles históricos mediante una nueva tratativa comercial bilateral o multilateral. En todo caso, es necesario complementar este análisis meramente cuantitativo, con el análisis más detallado del contenido del comercio bilateral, cuestión que posiblemente trataremos en un próximo artículo.