Alarmas y deficiencias en las organizaciones de hoy día

Generalidades

El comportamiento dinámico de los escenarios económicos presenta una competitividad muy exigente, en donde predominan la presencia de productos, servicios con sellos de calidad, cumpliéndose con todas las normativas de calidad internacional pautada.

Todo ello ha hecho, que las empresas para poder operar eficientemente en ellos, requieren contar con un gerencia capaz de integrar cohesivamente sus recursos, sin descuidar lo que en el presente representa tener un equipo humano bien capacitado e identificado con sus roles, de tal forma que garanticen productividad.

Es necesario identificar la manera de cómo se esta manifestando el comportamiento organizacional en las empresas, cuál es su clima que muestre los logros obtenidos, así como todas aquellas barreras, impedimentos, obstáculos que se han tenido que vencer para ser mas operativo.

Algunos gerentes están plenamente identificados con la importancia, el alcance de contar con un buen recurso humano desarrollado, capacitado, capaz de darle paso a la experiencia que ponga en práctica sus habilidades y destrezas para salir adelante en productividad.

Consideraciones básicas y alcance

No sorprende por tanto, que se manifieste, que la proactividad hoy en día las organizaciones luchan por implementar en su negocio un proceso de reingeniería, administración estratégica y otro tipo de filosofías. La implementación exitosa depende en gran parte en la curva de aprendizaje y en la resistencia al cambio de la misma. Todavía, de alguna manera, se utiliza el tradicional entrenamiento de cursillos por unas cuantas semanas que sólo formarían parte de un currículo y no del desempeño diario de la organización.

Es necesario que las organizaciones reconozcan la necesidad de utilizar herramientas flexibles que se puedan implementar con rapidez y que muestre resultados en el menor tiempo posible.

Cualquier persona externa a la compañía puede detectar fácilmente los puntos en donde ésta, está siendo ineficiente. El problema es que, la gente que trabaja dentro de ella, ni siquiera se percata de las cosas que están yendo mal, o si lo notan, hacen como si no hubiera pasado nada.

La gerencia debe estar pendiente que algunos de los aspectos malos de una empresa, en cuanto a su desenvolvimiento pueden ser los siguientes:

• Casi nadie se emociona por las cosas relacionadas con el trabajo.
• Las cosas que sí los emocionan están fuera del trabajo.
• A la gente sólo le importa sus cheques de pago, sus vacaciones y sus pensiones.
• La actitud general es: no hagas algo que no tengas que hacer. Luego haz lo menos posible.
• Todo parece indicar que en el día todos parecen moverse en cámara lenta… hasta que es hora de irse a casa: entonces todos actúan rápidamente.
• Cuando se habla de hacer un mejor trabajo, ¿qué sucede?, muchas miradas vacías.
• Nadie asume más responsabilidad de la necesaria. Si el trabajo no sale, es mi problema, no el de ellos.
• Todos hacen apenas lo suficiente para que no se les grite o despida.
• A nadie le importan las mejoras; todos temen al cambio.
• Si se dice, «Si no le echan ganas, se quedarán sin trabajo», pero eso sólo los desmoraliza y las cosas empeoran.
• Cuando se trata de motivar a la gente, los resultados, cuando los hay, son de corta duración.
• Se le presta muy poca atención al reconocimiento, el desempeño
• Muy poca participación en la toma de decisiones
• Muy poca motivación en pro de la iniciativa, creatividad.