Chichi Páez: “Para mantenerse activo hay que estar siempre aprendiendo”

Toma del www.el-carabobeno.com por Ana Isabel Laguna

Llegó puntual a la cita. José “Chichi” Páez, a sus 77 años aún muestra un espíritu joven. ¿La clave?: “Mantenerse activo, mediante la lectura, el ejercicio y buena alimentación. Aunque admite que hoy la alimentación es algo cuesta arriba, invita a procurar un equilibrio. Ese mismo equilibrio, que también sugiere en las actividades, tanto profesionales, familia y el entretenimiento, prevaleciendo la familia. Ese núcleo familiar que nuestro entrevistado considera que hoy está distanciado, por la tecnología.

Ante ello, sugiere José “Chichi” Páez a buscar espacio para compartir en familia; establecer normas de convivencia, en medio del uso de la tecnología digital. También, considera que la situación país y el que haya emigrado un gran número de venezolano igual está perjudicando la integración familiar.

Reflexiones que hizo con motivo de cumplir hoy, 19 de julio,  50 años de egresado de nuestra Universidad de Carabobo, en la licenciatura de Educación con especialidad en Administración Educacional. Y proximamente el 5 de septiembre publicará su articulo número mil en El Carabobeño. ¿Qué cómo ha logrado mantener su columna “Gerencia en acción”. “La clave es la disciplina, la cual conlleva a la constancia”.

“Valores que vienen de familia”, expresa nuestro articulista, con una dilatada experiencia académica universitaria. Más de veinte años en la industria privada, complementada como Consultor Organizacional. Productor y director del micro-programa “Gerencia en Acción” que se transmite diariamente por Universitaria 104,5FM. Sub-Director de la Revista Digital entorno-empresarial.com.

Ya está jubilado como profesor titular de nuestra alma mater, pero se mantiene se activo en el Área de Postgrado en programas de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales y de la Facultad de Ingeniería. También ex-profesor de Pre-Grado de UNITEC, y Postgrado del IUFAN.

Con estudio de cuarto nivel en Educación y Capacitación Industrial, en los Estados Unidos, y especialista en Gerencia de Recursos Humanos y relaciones laborales en la UC, guarda una humildad inmensa, recordando sus inicios en El Carabobeño.

Profeta en su tierra

Se dice que por lo general nadie es profeta en su tierra. Pero, la trayectoria de “Chichi Páez” revela todo lo contrario. Ha sembrado sus frutos en nuestra ciudad, que lo vio nace, en la parroquia San José. Manifestó que su papá murió cuando apenas él tenía 5 años, inspirándose en la guía de su padrino Nicolás Franco, quien asumió los roles de padre y le sembró la obligación del hogar, como son los valores y los principios éticos, Y desde el punto académico, del doctor Rafael González Baquero; “mi motor académico, que sembró en mi la responsabilidad del ser un buen maestro”.

Es de lo que piensa que aprender a gerenciar, es saber reconocer primero nuestras debilidades y fortalezas, para saber dirigirnos nosotros mismos, para luego llevar esas enseñanzas hacia los demás, hacia la familia, hacia quienes nos rodean. Y así hacia el plano organizacional.

Ante la situación país, reconoce que no la tenemos fácil; pero “serán los valores que nos mantendrán unidos. Que en la unión está la fuerza para enrrumbar nuevamente al país”.

Ese misma fuerza que nos alentó para seguir en El Carabobeño. En ese momento, mostró cierta nostalgia. Porque recordó cuando visitaba estas instalaciones, repletas de personal. Hoy algo desolada, como reflejo del país.

Pero, también admite que hay que ponerle corazón. Costará mucho, pero hay que alejar el conformismo y la desesperanza. Y para quienes están comprometidos con la enseñanza, sugirió que afrontar los grandes retos que nos presenta el panorama actual, en que se presentan grandes oportunidades. Aunque hay personas que se dedican a llorar, otros se dedican a vender pañuelos, por ello es indispensable reforzar nuestra motivación. “A no dejarnos amilanar por las circunstancias. A mantener la comunicación; asumir retos, con visión de integración, a pensar en equipo”.

Son las mismas claves que mantiene en su hogar con más de 53 años, en los que procreó dos hijos, una hembra y un varón, que le han dado cinco nietos.

Con sus escritos gerenciales, no podemos dejar de reconocer las grandes aportaciones que ha legado el profesor Páez día a día y en donde las empresas, especialmente las venezolanas, afrontan grandes retos, requiriéndose de una nueva visión, gestión empresarial que garanticen resultados que le favorezca.

Es de lo que piensa que para rescatar el país se necesita un cambio de modelo; “porque seguiremos empobreciéndonos. Costará varias generaciones, pero en la activación de redes, de conocimientos y ética están las vías hacia esa recuperación del país. Sin divisiones”.

Nunca hizo referencia de sus atributos académicos. Su humildad es admirable. Habló de sus raíces, de sus orígenes. Se dedicó como todo un maestro a dar claves de motivación, de llenarse de espiritualidad, que solo lo da en nuestra creencia en Dios; en la unión de la familia y los amigos. Y así, se traduce en las empresas, a trabajar en alianza, en unión, con valores, que no se negocian; “se entremezclan para dar cada quien lo mejor de sí, para un bien común: Levantarnos y seguir en la lucha por un mejor bienestar”.

Alentó a los jóvenes, a estudiar, a seguir preparándose para asumir los retos: “es el camino a seguir, pese a los obstáculos. A seguir los mandamientos bíblicos también, son valiosos, es lo que hará recuperar nuestra nación, amándonos los unos a los otros, con integridad”.