El ESTADO CON SU NUEVA LEY DE EDUCACION ARREMETE CONTRA LAS UNIVERSIDADES VENEZOLANAS

Sin democracia la libertad es una quimera. Marcelo Fernando Castro

Es un hecho cierto, que el estado Venezolano se está jugando una carta muy peligrosa en sus aspiraciones políticas de consolidar su ideología de instituir el Socialismo en Venezuela, esta vez, adentrándose en todo lo concerniente a la Educación , un tendón muy vulnerable, que debe saberse manejar de tal forma, que no conlleve a reacciones que pueden originarle serios problemas, como el caso de la educación y sus repercusiones en las universidades públicas, en donde debe predominar siempre el pensamiento abierto , libres a las ideas , debate y sobre todo, respeto a su autonomía.

Lo cierto ,que antes que termine el año, el gobierno actual bajo la dirección del teniente coronel Hugo Chávez Frías, acaba de aprobar la nueva ley d educación que ha originado una reacción popular, especialmente del estudiantado, las autoridades universitarias, profesores muy drástica por la forma como esta ha sido sancionada y sobre todo, lo que involucra muchos de sus artículos que atenta seriamente contra la autonomía universitaria, la cuál debe ser siempre respetada y que garantiza democracia, libertad.

La ley se aprobó como es de conocimiento público: «entre gallos y medianoche» y en donde gobierno, que no lo puede negar, no realizó una amplia consulta con los organismos e instituciones que tienen que ver con la educación, como universidades, estudiantes, comunidad universitaria.

Pareciera ser de acuerdo a los actuales acontecimientos olvidar el presidente, quien es fiel admirador del Padre de la Patria las ideas de Bolívar, que como muy bien nos lo recuerda efemeridesvenezolanas.com/documentos/html/ploe.htm: El Libertador Simón Bolívar en sus discursos, cartas y otros documentos, tuvo una permanente preocupación por el hecho educativo. Ya en el discurso de Angostura, en 1819, dejó claro que la Moral y las Luces debían ser un hecho primordial de la República. El proyecto constitucional echó las bases del concepto de Estado Docente, al proponer la creación de la Cámara de Educación, la cual establecería las normas que regirían la enseñanza en toda la República. Así mismo, dejó testimonio de su gran interés en los problemas pedagógicos planteados por Simón Rodríguez, del cual toma ideas innovadoras y trata aspectos como la orientación vocacional («inclinación, genio y temperamento»), la necesidad del estudio de idiomas extranjeros y el conocimiento geográfico como parte de la formación básica.

En su condición de gobernante, Bolívar mantuvo la tesis de la Ilustración, al darle relevancia al hecho educativo como base fundamental para garantizar el avance moral y material de la República. Muestra de ello son la creación, mediante ley, de la Dirección General del Instrucción Pública para toda la Gran Colombia y el establecimiento de un régimen legal para la Universidad de Caracas, sobre bases republicanas, en 1827.

Esa preocupación del Libertador por la educación tiene continuidad en otros gobernantes: José María Vargas contribuye a definir la instrucción pública como un servicio a la ciudadanía; además, fundamenta el concepto moderno de Universidad. Sucesivos gobiernos contribuyen también con su aporte al desarrollo e institucionalización de la instrucción pública. Queda en la tradición constitucional la educación como servicio público, y cobra especial relevancia en la Constitución de 1864, donde, por primera vez de manera expresa y directa, se dicta el principio de la gratuidad de la educación.

En las Cartas Constitucionales de 1871, 1874 y 1891 persiste la obligación del Poder Público de garantizar la gratuidad la educación primaria y de artes y oficios. En esos años el pensamiento pedagógico venezolano mantiene su relevancia con la obra de Cecilio Acosta y otros educadores venezolanos

Nos agrega la fuente de información citada, que , las Constituciones de 1904, 1909, 1914, 1922, 1925, 1928 y 1931 establecen nada más que la nación garantiza a los venezolanos la libertad de enseñanza, aunque no está demás señalar la vigencia que en esos años mantiene el principio del Estado Docente, reivindicado por el ministro Rubén González.

A pesar de que la Constitución de 1936 se circunscribe en este punto, a establecer la garantía de la libertad de enseñanza, es conveniente destacar el momento relevante de la creación, en ese mismo año, del Instituto Pedagógico Nacional, concebido por Mariano Picón Salas, a la sazón Superintendente de Educación.

La Constitución de 1961 consagra en su artículo 80 establece «la educación tendrá como finalidad el pleno desarrollo de la personalidad, la formación de ciudadanos aptos para la vida y para el ejercicio de la democracia, el fomento de la cultura y el desarrollo del espíritu de solidaridad. El estado orientará y organizará el sistema educativo para lograr el cumplimiento de los fines aquí señalados».

Por su parte , en su exposición de motivos, la Ley Orgánica de Educación de 1980 señala que «el incremento cuantitativo no se ha correspondido con los avances cualitativos de la educación, la cual continúa siendo un proceso de escasa productividad». Esta consideración mantiene aún su vigencia, aunque con el agravante de que, proporcionalmente, el avance cuantitativo no sólo se ha detenido, sino que, en algunos casos, se ha revertido, y en otros se ha estancado peligrosamente, en especial en los sectores afectados por diversos grados de pobreza.

Lo cierto, que hay una seria preocupación por las acciones que el actual gobierno ha emprendido con respecto a la educación, sobre todo, por la ausencia de no consultar, tomar en cuenta , las opiniones de quienes están comprometidos con la educación, que se supone conocen a fondo su alcance , lo que ella encierra, lo que se necesita y sobre todo, la garantía del respeto a la autonomía y todo lo concerniente a la realidad venezolana. De ahí, que la reacción era de esperarse, más en un país como Venezuela no acostumbrado en su historia a navegar en el socialismo, una cultura desconocida y como lo señala Roberto Lückert, Arzobispo de Coro y vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana : La inspiración cubana de la nueva Ley Orgánica de Educación (LOE) en Venezuela podría convertir los salones de clases en más de 26,000 escuelas públicas y privadas en un escenario de confrontación política, según la crítica procedente de diversos sectores, entre ellos académicos y líderes de la Iglesia Católica.

«Igual como ocurre en el sistema educativo cubano, aquí se va a utilizar la escuela como instrumento para imponer la ideología comunista».

De acuerdo a Lückert , los estudiantes de preescolar hasta la universidad van a ser instruidos «de acuerdo a un proyecto político del gobierno que lo tiene copiado de Cuba, y atropella la Constitución»

Inquiete , por ejemplo, como lo señala también, el educador y rector de la Universidad Católica Andrés Bello, Luís Ugalde, cuando nos cita el Artículo 5 de la ley, que es uno de los más polémicos, en donde se dicee: que el Estado tendrá la posibilidad prácticamente ilimitada de intervenir y controlar instituciones educativas privadas. Agrega, entre otros apartados, que el Estado tendrá potestad de evaluar «la idoneidad de las personas naturales y jurídicas para el cumplimiento de los requisitos éticos, económicos, académicos, científicos, de probidad, eficiencia, legitimidad y procedencia de los recursos para fundar y mantener instituciones educativas privadas».

Es un hecho cierto, que el rechazo a la inspiración cubana de la LOE se ha manifestado en la calle. Pancartas con inscripciones de «Cubanos Go Home» y «No a la Ley de Educación Cubana» Consideramos muy interesante la información al respecto que proporciona carlossaavedramartinez.blogspot.com, que Según Leonardo Carvajal, experto educativo y presidente de la organización no gubernamental, Asamblea de Educación, que es un hecho cierto ,que la LOE fue elaborada con asesoría cubana y refleja fundamentalmente valores de la sociedad cubana.

Carvajal aseguró en un foro que tuvo lugar en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) en junio, que la diputada oficialista María de Queipo, que presidió la comisión de Educación de la Asamblea Nacional, que tuvo a su cargo la elaboración de la LOE, «se reunió con Armando Hart, ex ministro de Educación cubano, para que asesorara el proyecto.

«No puede ser que una ley de Educación pensada en Cuba, se quiera aplicar en Venezuela», indicó Carvajal. «De igual forma no se puede implantar modelos que tengan los valores cubanos, porque ese es un atentado contra los más altos intereses de la patria».

Definitivamente, hoy más que nunca los docentes, estudiantes, comunidad universitaria deben estar atentos ante esta realidad, hacer valer su derechos y sobre todo apoyar todas las acciones que las autoridades universitarias lleven a cabo a fin de evitar que esta ley como ha sido aprobada se aplique. Para ello es necesario unión,. Integración de ideas, acciones que revoquen lo que fue aprobado sin la consulta de quienes han estado siempre comprometido por resguardar la libertad de pensamiento, autonomía universitaria y responsabilidad social de las universidades.

Esperemos que el presidente Chávez reflexione sobre ello y rectifique este paso que se ha dado, que no es conveniente para la educación venezolana, más ahora, ante escenarios en donde se requiere de profesionales bien preparados, capaces de aportar sus ideas, conocimientos en pro de todo aquello que favorezca al país en todos sus aspectos.