El Nuevo Docente requerido ante la crisis de las Universidades

”Nunca consideres el estudio como una obligación,
sino como una oportunidad para penetrar
en el bello y maravilloso mundo del saber.”

Albert Einstein

Las universidades nacionales nuestro caso, como hemos comentado en otras oportunidades, afrontan serios problema en su responsabilidad social y de formación de los distintos profesionales que requiere el país, para no solamente afrontar los retos que el presente le demanda, sino garantizar excelencia académica, calidad que actualmente deja mucho que decir.

Deben las universidades retroalimentar sus debilidades, empezando con garantizar el funcionamiento optimo de una gerencia educativa que ha dejado mucho que decir, la revisión de sus programas de las distintas carreras que ofrece, sus sistemas administrativos y de control, su vinculación con las TIC y desde luego sus docentes, aspecto este delicado dado a la realidad actual como se seleccionan, desempeñan.

Es muy necesario evaluar al docente universitario que el presente requiere, determinar, cuales deben ser sus competencias que garanticen logros, especialmente en la capacitación, formación de sus alumnos y en lo concerniente a la investigación.

No pueden seguir las universidades contratando docentes por compromisos políticos, de amistad, cofradías, hay que seleccionar a docentes avalados, no solamente por sus conocimientos académicos actualizados, sino por su experiencia, habilidades, destrezas, innovación, creatividad, proactividad, interrelación humana, visión, estratega.

Debe como muy bien lo expone ‘buap mx’, que el docente sea una garantía de formación y capacitación desempeñándose exitosamente en el aula de tal forma que:

• Esté convencido de la importancia y el sentido del trabajo académico y formativo de la materia que imparte.
• Respete a los alumnos, sus opiniones y propuestas, aunque no las comparta necesariamente.
• Evite imponer en un ejercicio de autoridad sus ideas, perspectivas y opiniones.
• Reconozca su responsabilidad como guía o facilitador de los procesos del grupo.
• Establezca una buena relación con los alumnos basada en el respeto mutuo
• Evite apoderarse de la palabra y convertirse en un simple transmisor de información.
• Sea capaz de motivar a los alumnos hacia un aprendizaje significativo.
• Plantee desafíos a los alumnos que los muevan a cuestionar sus conocimientos, creencias, actitudes y comportamientos.
• Evite que el grupo caiga en la desesperanza, la impotencia o la crítica estéril.
• Anime a sus alumnos a construir alternativas viables para afrontar los problemas planteados.

Además de lo señalado, en la exposición de su cátedra, los temas que deben integrarlos tienen que estar actualizados de acuerdo al avance de las ciencias, herramientas y todo aquello que la sociedad de conocimiento exige.

Ayudar a sus alumnos a sacar conclusiones a partir de los elementos aportados por los equipos o los propios alumnos de manera individual.

Incentivarlos a participar a debatir la realidad, el escenario actual y dar paso a propuestas, modelos, soluciones que garanticen resultados.

Es importante contemplar la necesidad de la reflexión, así como la oportunidad de compartir la diversidad de puntos de vista de las personas que conforman al grupo. Los alumnos podrán así tener la vivencia de la diversidad y la posibilidad de acciones colectivas en las que los distintos puntos de vista son respetados.

No deben descuidarse los conocimientos, habilidades y actitudes adquiridos y desarrollados, tanto en lo individual como a nivel de grupo.

En este sentido, el profesor debe estar atento de ello para dar paso a la retroalimentación requerida en caso de surgir debilidades, impedimentos en pro de los objetivos establecidos con respecto a la capacitación y aprendizaje de los participantes.

(*) Docente de Postgrado UC, EXATEC, EGADE

Web: www.carmorvane.com