Hungría y Suiza desarrollan un programa de ordenador que descifra el lenguaje de los perros

(Redacción) – Ángel Díaz – Cuando dicen que el perro es el ‘mejor amigo del hombre’, no es por casualidad. Esta especie, creada y domesticada por la nuestra a su imagen y semejanza, presenta características que nos fascinan precisamente por eso: porque son como nosotros. O eso nos parece.

Ahora, un grupo internacional de científicos ha descubierto que sus ladridos configuran un pequeño lenguaje que nuestros oídos no distinguen pero los ordenadores sí.

Una investigación llevada a cabo con 14 perros de raza Mudi húngara, (un tipo reciente de pastores húngaros), ha revelado que estos animales emiten diferentes clases de ladridos cuando juegan, cuando se topan con un extraño, cuando se dirigen a su dueño o cuando se meten en una refriega.

Los análisis con ordenadores también han revelado que cada perro emite su propio tipo de ladrido en todas estas circunstancias, y que estas diferencias van más allá de lo que percibe el oído humano, mucho menos sensible que el de los perros.

De hecho, la investigación sugiere que algunos de estos sonidos son comprensibles para los demás perros, por lo que les servirían para comunicarse entre ellos y quedaría descartada la vieja teoría de que los perros sólo aprendieron a ladrar para imitar el lenguaje de las personas.

Sin embargo, también en esto se nota el contacto con los humanos: cuando los perros juegan entre ellos, cada cual tiene su propia personalidad y su ladrido es claramente diferenciable por el ‘software’. Por el contrario, los ladridos emitidos ante la presencia de una persona extraña son casi siempre idénticos, independientemente del perro individual del que procedan.

El estudio ha sido realizado por los equipos de Csaba Molnár, de la Universidad Eötvös Loránd, (Hungría), y Frédéric Kaplan, de la Escuela Federal de Lausanne, (Suiza). Sus resultados se acaban de publicar en la revista ‘Animal Cognition’.

Los científicos grabaron más de 6.000 ladridos extraídos de seis contextos distintos, (cuando el perro está solo, ve una pelota, pelea, juega, se encuentra con un extraño o sale a pasear). Como media, el ‘software’ identificó con éxito el 43% de los ladridosen relación al contexto (juego, pelea) y un 58% en cuanto al perro que los emitió.

«Los niveles de reconocimiento que encontramos estaban muy por encima del nivel de casualidad», aseguran los investigadores.

«Estos descubrimientos sugieren que los perros que ladran poseen características acústicas específicas para el contexto y para el individuo», según concluye su informe.

Los creadores del ‘software’ esperan que éste sea útil también en otros estudios sobre la conducta y capacidades cognitivas de los animales. Aunque otra de las aplicaciones en la que ya se está pensando sería crear un dispositivo que ayudara a los humanos a comunicarse con sus mascotas.

Fuente: http://www.elmundo.es/