ÍRRITA SENTENCIA DEL TSJ SOBRE UNIVERSIDADES

El cuestionado TSJ por las irregularidades en su designación, aprobó una sentencia mediante la cual obliga a las universidades autónomas a realizar elecciones de autoridades en un lapso de seis meses. Esta sentencia viola el artículo 109 de la constitución nacional que establece el reconocimiento de la autonomía universitaria para el cumplimiento de sus funciones académicas y organizacionales.

Se darán de acuerdo a la carta magna su propio gobierno por elecciones de sus comunidades universitarias conformadas por profesores, estudiantes y representantes de los  egresados. Se viola la propia Ley de Universidades (artículo 9) como precepto legal específico para el funcionamiento de las máximas casas de estudios. Se modifica el claustro universitario estableciéndose arbitrariamente  la participación de personal de apoyo en las elecciones para elegir autoridades. En otras palabras, los profesores, estudiantes y representantes de los egresados tendrán una participación igualitaria con el personal de apoyo para elegir las autoridades, lo cual no existe en ninguna parte del mundo democrático con existencia de universidades autónomas.

     La citada sentencia está siendo abrumadoramente rechazada por todas las comunidades universitarias del país. Encuestas recientes ubican en mas de un 90% el rechazo a esta  sentencia violatoria de la vigente constitución y la propia Ley de Universidades. Se aprecia notoriamente dentro y fuera de los recintos universitarios el rechazo de profesores, estudiantes, egresados, académicos y en general en todos los sectores de la sociedad a tales propósitos de asaltar a nuestras máximas casas de estudios para controlarlas como en todo régimen totalitario ya sea de extrema izquierda o de extrema derecha (los extremos se tocan).

Muy cercano a nuestro país, tenemos a la dictadura castrocomunista que lleva 60 años esclavizando al pueblo cubano, con la universidad controlada, sin ningún tipo de autonomía. Aquí cabe recordar una declaración  del 2005 en Venezuela del presidente  del centro de estudiantes de la universidad de la Habana que afirmaba que el “INTERNET era un invento del diablo”. Así se actúa en los países antidemocráticos en el tratamiento de la educación en todos los niveles, con mas razón en el nivel superior. Ya esto es historia conocida de los países que han transitado el comunismo y todos los extremismos ideológicos.

     Tengo la convicción de que la citada sentencia  no podrá ser ejecutada ante el mayoritario rechazo de las comunidades universitarias y de la inmensa mayoría de los sectores de la sociedad civil venezolana. Las universidades no se van a rendir ante esta embestida totalitaria del régimen castro chavista madurista.

No lograrán sus macabros objetivos de doblegar la autonomía universitaria a pesar de todos los recortes presupuestarios que las  han venido afectando significativamente hasta el punto de que sus salarios son cada vez más miserables. Por ejemplo, un profesor titular a dedicación exclusiva con doctorado, después de 25 años de servicios, devenga un salario que no cubre ni el 5% del costo de la canasta básica familiar. Los profesores universitarios llegamos a formar parte de la clase media venezolana, hoy estamos engrosando las filas del 90% de los venezolanos en pobreza general. Que decir de los niveles inferiores de la educación desde el preescolar hasta el ciclo básico, la situación es peor, la deserción estudiantil y de profesores en todos los niveles educativos es preocupante.

Las estimaciones de varias ONG son espeluznantes, se mencionan  hasta un 35%  de profesores en todos los niveles educativos, nuestra educación se está quedando sin docentes y sin alumnos. Aquella máxima del insigne maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa de que Venezuela será lo que son sus maestros, nos aproxima ya a una hecatombe en la educación venezolana. Dios nos libre de llegar a tanto.  La más grave crisis económica, social y política de nuestra historia republicana está generando la mas alta diáspora de América que ya ronda los cinco millones de personas.

El autor de este articulo, es Economista, profesor titular universitario, ex presidente de la Academia de Ciencias Económicas del Edo Zulia, Miembro de Venezuela Positiva. [email protected]