Jesús Seguías: «Faltan políticos con criterio de nación»

XABIER COSCOJUELA
Jesús Seguías cree que la oposición debió ofrecer su apoyo al Gobierno y de ser rechazada, dejar al jede del Estado solo en el ring

-¿Por qué la MUD no leyó bien los resultados del 6D?

-Vengo sosteniendo que la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) le dio una lectura incorrecta a los resultados del 6D, porque creen que el país voto por la MUD cuando en realidad está votando para enviarle un mensaje al presidente Maduro para que este genere un cambio radical en sus políticas económicas y también a su política de seguridad ciudadana, que son los dos problemas que más aquejan al país. De inmediato algunos actores fundamentales de la oposición consideraron que era el momento de la dulce venganza y de pasar a confrontar directamente al Gobierno. 

-La MUD dice que una de sus ofertas electorales fue precisamente salir de Maduro

-Creo que la que más se nombró fue el cambio y de paso la solución a la crisis, había hasta consigna de que era la última cola. La oposición en realidad no habló mucho de salir de Maduro porque ya venían curados en salud con el fracasó que fue convertir las elecciones municipales en un plebiscito. 

-Lo asomó.

-Lo asomó muy poco. Se enfocaban más en la crisis como tal y de hecho el 61% de los venezolanos pensaban que la Asamblea Nacional iba a darle solución a la crisis. El tema era que después de las elecciones la agenda que se le imponía la oposición fue totalmente contraria a la que finalmente se impuso. 

-¿Cuál debió ser la agenda?

-Dar las gracias al pueblo venezolano por la victoria obtenida y acto seguido solicitar una audiencia con el presidente Maduro para ver cómo la nueva mayoría parlamentaria y el gobierno nacional se sentaban a puerta cerrada y con micrófono apagados para buscar una solución inmediata a la crisis. 

-Ahora, Maduro habló la madrugada del 7D y no abrió esa puerta

-No importa. En política todo líder y toda organización debe actuar con proactividad, tener su agenda, que era no caer en la provocación de Maduro, quien está allí para confrontar. Lo sensato era discutir la crisis, pero lo que está en la agenda de nuestros políticos es el poder. 

-¿No cree que para solucionar la crisis hay que salir de Maduro?

-Ahí es donde viene el tema. Pareciera lineal mas no es exactamente lineal porque la política no es tan lineal, la política tiene sus vericuetos. Y tiene que saberse manejar todos los hilos del poder para poder dar las respuestas correctas. Para solucionar la crisis se requiere que a Venezuela lleguen inversionistas para restablecer la capacidad productiva del país, y atraer inversionistas implica tener reglas del juego bien claras. 

-¿Cuáles reglas?

-En primer lugar, un marco jurídico confiable para garantizar las inversiones que vengan a Venezuela. En segundo lugar, un gobierno que respete ese marco jurídico. En tercer lugar, paz social y política, porque no hay nada más cobarde que el capital. Si eso es así, esa verdad vale para Maduro y vale para la MUD. Entonces tengo que enfocar mis estrategias en torno a ese objetivo. Eso pasa entonces por preguntar varias cosas si se necesita paz social y política y un nuevo marco jurídico que modifique leyes como la de precios justos, de inamovilidad laboral y otras, tienes que hacerlo con el mayor consenso posible. No hay manera que usted tenga estabilidad social y política en una sociedad confrontada. 

-Pero vamos en dirección contraria

-Claro. Me debo preguntar qué debo hacer yo para lograr eso,. Volvamos al 7D: le pido al presidente Maduro una audiencia formal, éste decide si la concede o no. Si la acepta bingo y le planteo: mire Presidente es que esta crisis es de dimensiones colosales y usted sólo no va a poder, primero porque ahora tiene una Asamblea Nacional que no es de su partido y necesita el apoyo del Parlamento; en segundo lugar porque la mayoría de los empresarios no lo quiere, y para serle franco nosotros tampoco podemos con esta crisis solos. Las medidas que hay que tomar son tan contundentes que nadie quiere asumir el costo político y mientras eso ocurre sigue profundizándose la crisis y el sufrimiento de los venezolanos puede generar un estallido que nos va arrasar a todos nosotros por igual. 

-Usted dice que la MUD leyó mal los resultados, ¿no será también que Maduro los leyó mal?

-No, Maduro los viene leyendo mal desde que llegó al Gobierno. Insisto, si Maduro acepta la reunión y la MUD le habla en esos términos de asumir los costos juntos, el Presidente tenía dos opciones: aceptaba dar el viraje en forma conjunta o decir `yo insisto de la economía socialista’, es decir voy a insistir en los errores que llevaron a la crisis. La oposición se retira de la reunión y le habla al país, explicando que el presidente Maduro insiste en sus políticas, él cree que tiene la razón, nosotros ahora desde la calle seguimos insistiendo de manera responsable que él tiene que cambiar y todo el mundo se va a nuclear alrededor de una oposición que está actuando de manera correcta. 

-¿Cree que con ese planteamiento la MUD hubiera disminuido el apoyo político a Maduro y al PSUV, que no fue nada despreciable a pesar de la crisis que estamos teniendo?

-El país entero, incluyendo el pueblo chavista, hubiese presionado a Maduro a que se entienda porque aquí hay una oposición inteligente, una oposición que le está planteando el diálogo. Maduro tenía la otra opción: no acepto el diálogo con la burguesía apátrida. Respuesta de la MUD: móntese ustedes solo en el ring, Presidente, nosotros no lo vamos a acompañar, porque eso es prolongar el sufrimiento de los venezolanos. Eso es lo que estratégicamente se imponía: seguirle mordiendo gente al chavismo. Fíjese que, según nuestros datos, lejos de haber disminuido luego del 6D, el chavismo creció de 20 a 26% y la oposición bajó. 

-¿La "ruta del cambio" de la MUD insiste en el error? 

-Lo del martes tiende a ratificar la política de la confrontación lo cual implica un ganador y un perdedor. El ganador, que en este caso sería la oposición, y el perdedor, que sería el chavismo, el cual va a salir a la calle a hacer oposición con un cuchillo en la boca. No me dejaste gobernar con tu guerra económica y la amenaza del imperialismo, porque ellos creen en eso, entonces yo no te voy a dejar gobernar. Van a incendiar la calle, porque tienen con qué. Le pregunto a la MUD, derrotaste a Maduro y ahora qué, aplica el plan de ajuste severísimo que se tiene que aplicar para poder restablecer la economía a su niveles normales sin que se te incendie el país por los cuatro costados, y un país incendiado por los cuatro costados no es atractivo para ningún inversionista

-Para los vendedores de armas

-Serían los únicos. Hay que actuar responsablemente y eso implica plantearse qué va a pasar después de la salida de Maduro, ¿podrá hacer los ajustes? Si no los puede hacer cambia de estrategia, enfócate en la crisis y se va a dar cuenta que lo único que puede salvar a este país es que chavistas y opositores se entiendan. Muchos me dicen que eso es una utopía y pregunto, ¿hay otra solución? 

-¿La mayoría quiere diálogo?

-El 69% de los venezolanos considera que el Gobierno no ha hecho todo lo correcto y necesario para propiciar un diálogo sincero con la oposición, mientras que 49% piensa que tampoco la MUD ha hecho todo lo posible por el diálogo. 

-En las circunstancias políticas que acaba de describir, el chavismo pierde cualquier elección que se haga, por ello ¿no debería estar interesado en tratar de revertir la crisis y tender puentes?

-Hay muchos chavistas que estaban en la onda de buscar entendimiento, de hecho venía haciendo muchos puentes, pero la actitud que asumió la oposición después del 6D generó una aprehensión muy grande dentro de los dirigentes del chavismo que pudiesen estar interesados en dialogar. 

-¿Se reagruparon?

-Así es. Ahora, yo creo que nunca es tarde cuando la dicha es buena, pero por favor no sigamos cometiendo errores. Ahora me sacas tú tres opciones, todas constitucionales, pero no me respondes todavía el tema de la crisis. 

-¿Es posible entenderse con gente que mantiene un modelo que fracasó en todo el mundo?

-Creo que sí. En el chavismo ya hay factores internos que saben que esa política fracasó, que hay que rehacer el juego. 

-Pero no se manifiestan.

-No se manifiestan porque qué van hacer, ¿se van a lanzar contra Maduro para ponerse de acuerdo con una oposición que tampoco los quiere? 

-Usted le carga más las culpas a la oposición que al Gobierno

-Por supuesto que se la cargo hoy día, porque la oposición debe actuar con proactividad y a mí nadie me echa cuentos, los conozco a toditos. 

-¿Qué priva dentro de la oposición?

-Se están montando agendas en función de las aspiraciones personales de X o fulano de tal, cuando lo que debe privar es una oferta de entendimiento, porque vamos a tener que llegar a ello con muertos o sin muertos, y es mejor llegar sin muertos. Lo que yo vengo diciendo en mi libro Al borde del desenlace, el suicidio de la revolución:no le demos rienda suelta a las emociones destructivas que nos vamos a arrepentir de ello por el resto de nuestras vidas. Hay que demostrar amor por Venezuela. 

-¿Esto no es una demostración de falta de liderazgo?

-Por supuesto, porque en Venezuela no hay políticos sino busca puestos y cuida puestos

-Pero cada partido tiene su líder

-Ese es el punto que no hay partidos políticos. Todos los partidos en Venezuela, con excepción de AD y el PCV y el más tarde el MAS, sirvieron como plataforma electoral para que mengano fuera presidente. Inclusive Copei con Rafael Caldera. 

-¿Eso se agudizó en estos últimos tiempos?

-Claro, porque hay una crisis política estructural que va más allá de este tema Chávez-.oposición. Los partidos tienen que transformarse en Venezuela, tienen que conectarse con el siglo XXI. Todavía tenemos partidos de caudillos, de narcisistas de la política, que creen que sin ellos no funciona nada; después de mí el diluvio, no puede ser. 

-¿La mayoría de loa líderes actuales son de esa característica?

-Sí, sin duda alguna. Más aún, el país está sobreviviendo a sus políticos. Ese el drama de Venezuela. Cómo es posible que ante una tragedia como la que estamos viendo los políticos todavía no hayan tenido la más mínima sindéresis y decir `mire, si yo no puedo ni usted tampoco puede, vamos a ponernos de acuerdo para salvar al país. Eso es lo mínimo que se impone en un político que tenga criterio de nación.