La Comunicación, factor clave en el éxito de las organizaciones

Una organización es un patrón de relaciones -muchas relaciones simultáneas, entrelazadas-, por medio de las cuales las personas, bajo el mando de los gerentes, persiguen metas comunes. Estas metas son producto de los procesos para adoptar decisiones, la planificación. Las metas planificadas suelen ser ambiciosas, de largo alcance y sin final fijo.

Los miembros de una organización necesitan un marco estable y comprensible en el cual puedan trabajar unidos para alcanzar las metas de la organización. Las organizaciones son sistemas abiertos, sensibles tanto a las actividades del entorno interno como al entorno externo. La primera lección del pensamiento sistémico es, saber si tratamos con una complejidad simple o dinámica. La relación entre las diversas partes de un sistema, determinará el funcionamiento del mismo, de modo que cada parte, por pequeña que sea, puede influir en el comportamiento del conjunto.

Todas las partes de un sistema son dependientes entre sí; todas mantienen una interacción recíproca. El modo en que se relacionan unas con otras, les da la capacidad para influir en todo el sistema. De aquí podemos inferir una regla interesante para influir en los sistemas, en especial, en los grupos: cuantas más conexiones tengamos, mayor será nuestra influencia potencial. Crear redes de trabajo aporta influencia. De hecho, las investigaciones sugieren que los directivos de mayor éxito profesional, invierten cuatro veces más tiempo en el establecimiento de redes de trabajo que sus colegas menos reconocidos. Los grupos que forman alianzas introducen diferencias en los gobiernos, las organizaciones y los equipos.

Las nuevas políticas empresariales suelen encontrar barreras, pues la gente prefiere hacer las cosas como se han hecho siempre. No son los individuos quienes plantean las dificultades, es el propio sistema. Cada vez que se introduce un cambio en cualquier sistema complejo – una empresa, una familia o nuestra propia manera de ser – debemos esperar que haya resistencia. No puede haber estabilidad sin resistencia; son las dos caras de una misma moneda.

Para lograr conexiones fuertes entre los diferentes miembros de una organización, tiene que existir una visión compartida, proceso que requiere de un sistema de comunicación bien instituido. Entendiendo por comunicación, un ciclo o círculo que se realiza entre dos o más personas con un propósito definido. Cuando la comunicación es cara a cara, se debe prestar atención a la otra persona, así tiene usted idea de lo que hará o dirá después; un interlocutor responde a su conducta de la misma forma. Usted se comunica mediante palabras, calidad de voz y con su cuerpo: postura, gestos y expresiones. Usted comunica aún no diciendo nada y se mantiene quieto. Es por ello que la comunicación está compuesta por un mensaje, que pasa de una persona a otra. Muchas veces lo que la otra persona recibe como mensaje, no tiene el significado que envió su interlocutor. La comunicación es mucho más que las palabras que emitimos; éstas forman solamente una pequeña parte de nuestra expresividad como seres humanos. Las investigaciones demuestran que en una presentación ante un grupo de personas, el 55% del impacto viene determinado por el lenguaje corporal – postura, gestos y contacto visual- , el 38% por el tono de la voz y sólo el 7% por el contenido de la presentación.

Si las palabras son el contenido del mensaje, las posturas, gestos, expresión y tono de voz son el contexto en el que el mensaje está enmarcado, y juntos dan sentido a la comunicación. Por ello, no hay garantía de que otra persona capte el significado que usted intenta comunicar. La respuesta nos remite, una vez más al objeto, agudeza y flexibilidad. Usted tiene un objetivo en su comunicación, se da cuenta de las respuestas que obtiene, y va cambiando lo que hace o dice, hasta obtener la respuesta que buscaba. El significado de la comunicación es la respuesta que usted obtiene.

SINTONÍA
La sintonía o empatía es esencial para establecer una atmósfera de credibilidad, confianza y participación donde la gente pueda responder libremente. ¿Qué hacemos para estar en sintonía con las personas, cómo creamos una relación de credibilidad e interés, y cómo podemos mejorar y ampliar esta habilidad natural?

Cuando dos personas están en sintonía, la comunicación parece fluir, tanto sus cuerpos como sus palabras están en armonía. El lenguaje del cuerpo y la tonalidad son más importantes. Las personas que sintonizan tienden a reflejarse y complementarse en las posturas, gestos y contacto visual. Es como un baile, donde cada uno responde y refleja los movimientos del otro con movimiento propios. La gente de éxito crea sintonía, y la sintonía crea credibilidad.

COMPARTIR Y DIRIGIR
La sintonía le permite construir un puente hacia la otra persona; tiene así algún punto de comprensión y contacto. Con esto establecido, puede usted empezar a cambiar su conducta y ellos estarán en situación de seguirle. Puede usted guiarlos en otra dirección. Compartir es establecer un puente mediante la sintonía y el respeto. Dirigir es cambiar su propia conducta para que la otra persona le siga.

En nuestras empresas, la eficiencia y la eficacia aumentarán en la medida que la gerencia a todos sus niveles le den la relevancia y la importancia requerida al proceso de la comunicación. Es vital evaluar la retroalimentación de todos los mensajes tanto escritos como verbales, para asegurarnos que los mismos han sido entendidos y que contribuirán al logro de los objetivos buscados.  

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