Las nuevas tabletas, más allá del iPad

Entre sus principales ventajas destacan los demandados puertos USB y HDMI y una mayor potencia de los procesadores, sin embargo hay modelos aún demasiado grandes y pesados

El mercado popular de las tabletas, un híbrido entre el teléfono y el ordenador portátil, convive entre nosotros desde el pasado mes de abril, cuando aterrizó oficialmente el iPad de Apple. La principal novedad es que aunque Microsoft ya contaba con varios modelos en funcionamiento desde hacía más de un lustro, estos pertenecían a un rango profesional minoritario. En estos momentos, dada la gran expectación generada por este nuevo aparato, se prepara una ola de lanzamientos de tabletas destinadas al consumo para un usuario medio. Pero, ¿merecen la pena?

En los próximos meses y durante el primer cuatrimestre del nuevo año estas tabletas se nos presentarán con nombres tan exóticos como Folio 100, Galaxy Tab, PlayBook o Steak (bistec). Se trata de las respectivas apuestas, en el formato tableta, de Toshiba – especialista en los portátiles de bajo peso y precio elevado-, Samsung, RIM y Dell. Cada una aporta sus ventajas respecto a lo que propone el iPad, aparato de referencia en el sector, aunque también algunas desventajas.

Las mejoras más destacadas
Incorporan, en general, los puertos USB y HDMI que se echaban tanto de menos en la tableta de Apple -intencionadamente «capada» para que sólo se puedan descargar contenidos controlados-. Sus procesadores son más potentes y sus pantallas, también táctiles, muestran una elevada definición. Además son multitarea y se pueden utilizar, gracias a su salida HDMI de señal multimedia, como discos duros para reproducir películas o música.

Por si fuera poco, los nuevos modelos reducen el tamaño respecto al iPad, una característica reclamada por numerosos usuarios que, sin embargo, tras usarlo lo han considerado demasiado grande. De hecho, se rumorea que Apple piensa reducir ligeramente las dimensiones de la nueva versión de la tableta para hacerla más manejable y ergonómica.

Ahora bien, no todas tienen el mismo tamaño. Hay diferencias notables: desde las cinco pulgadas del Dell Mini «Steak» hasta las diez del modelo Folio 100. Por eso, cada una es conveniente para diferentes usos. Mientras el dispositivo de Dell es el apropiado para llevar encima, por su reducido peso y sus pequeñas dimensiones, el inconveniente es que su pantalla se muestra demasiado pequeña para un uso continuado.

Precisamente, sucede lo contrario con la propuesta de Toshiba. Incorpora un potente procesador y una tarjeta gráfica Nvidia que lo convierte en el más idóneo para ver películas o videojugar. Sin embargo, es demasiado grande y pesado para ser transportado durante mucho tiempo. Estos ejemplos demuestran como las nuevas tabletas se debaten entre dos extremos: la función de teléfono inteligente y la función de ordenador.