Las trampas comunicacionales de Chávez

Lcdo. José Dionisio Solórzano – Cadenas interminables, interpelaciones dónde un diputado de la oposición hable por 2 minutos seguido de una perorata ministerial de horas, entrega de la memoria y cuenta presidencial donde el Jefe de Estado interactúa con la disidencia parlamentaria dando la sensación de demócrata, ubicar al enemigo más débil de los oponentes candidateados y tratar de polarizar con él, estás y muchas técnicas más son utilizadas por Hugo Chávez en su ajedrez político y comunicacional.

Por más de una década el chavismo ha venido actuando en el escenario nacional venezolano apoyado por una serie de «trampas» comunicacionales que le ha permitido mantenerse en la opinión pública. Las técnicas goebbelianas de repetir «una mentira» o «una verdad relativa» hasta la saciedad es una de las formas empleadas por el régimen de los boinas rojas para aferrarse al poder.

Chávez creó su «enemigo» a vencer, así como Hitler unió a sus rivales más enconados en un sólo macabro cuerpo, al judaísmo y al comunismo, diciendo que éste último era instrumento del primero argumentando que el fundador del socialismo científico, Karl Marx era judío, así de esa misma manera el presidente venezolano ha pretendido fundir en un mismo molde al monstruo del «imperialismo gringo» junto con los partidos de la oposición. Él, también ha sido diligente a la hora de dividir al pueblo entre «ricos» y «pobres», siendo su política la de Robin Hood, mientras las de su oponente la más cercana a un villano del cine.

Hugo Chávez ha sido un maestro de la manipulación de masas, ha engañado, creado falsas expectativas, muchos de sus fracasos más estrepitoso uno que el otro los ha transformado en victorias relativas, el Jefe de Estado de la tierra de Bolívar ha pretendido y logrado en cierta medida apoderarse de los símbolos nacionales, así como de los iconos históricos más grandes de la nación (excepto al General Páez que ha sido vilipendiado), e incluso luego de su cacareada enfermedad ha querido rodearse de un halo de religiosidad, intentando borrar su pasadas agresiones en contra de la Santa Iglesia Católica.

Los estratagemas que se han aplicado a lo largo de la historia de «trampas» del régimen es extensa, los admiradores del «Che» han guiado la agenda política del país durante años, aunque desde hace un tiempo para acá la denominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) y los pre-candidatos presidenciales, que se medirán en unas primarias el próximo 12 de febrero, han marcado la línea de acción pública y el chavismo ha pasado de una posición de activo a reactivo.

El llamado Comandante utiliza las «trampas» comunicacionales para erigirse a sí mismo como «el salvador de los pobres», como el «paladín nacionalista contra el imperialismo agresor», a pesar que pretende regalar el Esequibo a cambio de unos votos en los escenarios internacionales, se presenta como «el hombre incansable», hasta ha llegado a decir que «no lo dejan trabajar».

Hugo Chávez coloca jaulas caza-bobos, donde los líderes de la oposición han caído, pero que gracias a ello han aprendido y rectificado en su proceder. Ya el Teniente Coronel no puede emplear las estrategias de ayer, ya su aparato comunicacional prodigioso en radio de señal abierta como comunitarias, televisoras, periódicos y hasta la más residente «guerrilla comunicacional» de las redes sociales, no posee el impacto de otrora, el discurso de le agota, es que 13 años no pasan en vano.

Su panacea discursiva es reeditar las viejas misiones que lo salvaron en el 2004, cuando se llevó adelante el revocatorio, es apostar a las viviendas, a pesar de ser el peor de los gobiernos en esta materia. Se le acaban los trucos de ilusionista político y se le escasea el tiempo.

Hay una fecha: el 7 de octubre.

Fuente: http://www.leanoticias.com/2012/01/20/las-trampas-comunicacionales-de-chvez-por-jos-dionisio-solrzano/