Los golpes en la cabeza y el uso de los pesticidas incrementan el riesgo de sufrir Parkinson

(Especial. Extractos tomados de consumer.es) Sin embargo, no se ha podido demostrar que la exposición a otros productos químicos, como los disolventes, o a los metales aumente el riesgo de sufrir esta enfermedad degenerativa.

En la aparición del Parkinson, la enfermedad degenerativa neuronal más frecuente después del Alzheimer, juegan un papel importante tanto factores genéticos como medioambientales, sostienen los científicos. Son muchos los estudios que lo sugieren y existen compuestos químicos que se ha demostrado que, en casos de grave intoxicación, producen síntomas muy parecidos a los temblores del Parkinson. Por ello, los investigadores se han interesado por la historia personal de casi 1.000 enfermos con Parkinson claramente diagnosticado o que presentan síntomas similares para ver si comparten factores de riesgo.

Los enfermos son de cinco países o regiones europeas, Italia, Suecia, Rumania, Malta y Escocia, y se recabaron datos sobre su exposición a lo largo de la vida a disolventes, pesticidas, hierro, cobre y manganeso. También se tuvieron en cuenta muchos otros factores, como si fumaban o tenían un pariente próximo afectado por la enfermedad. Tras el análisis correspondiente, se comprobó que el factor de riesgo más importante es tener familiares con la enfermedad, seguido de haber tomado durante más de un año medicamentos para la ansiedad, para dormir o para tratar la depresión, aspectos que ya se habían puesto de manifiesto en otros estudios anteriores.

También se confirmó la no relación del Parkinson con el consumo de alcohol. Sin embargo, se halló asimismo una correlación estadísticamente significativa entre el Parkinson y la exposición a pesticidas, con una clara y novedosa relación entre el grado de exposición y la aparición o no de la enfermedad. Lo que no se puede precisar es, cuáles son los pesticidas implicados, por lo que resultan necesarios nuevos estudios. No se encontró, por otra parte, relación entre la exposición a los disolventes o a los metales a lo largo de la vida y el riesgo de padecer Parkinson.

Han comentado los investigadores, que pertenecen al proyecto Geoparkinson, financiado por la Comisión Europea que: “También tiene implicaciones para los usuarios de pesticidas en un contexto laboral y quizás también en un contexto recreativo”.