Luis Ugalde: «Es un disparate llamar a Cristo socialista»

«Si uno lo toma en serio, el socialismo no es una denuncia contra la opresión, sino un intento concreto por diseñar un modelo económico más justo en las sociedades modernas» (Jorge Santos)

«A mí me negaron la nacionalización en el primer gobierno de Caldera, por comunista». Después del 27 de febrero, siendo vicerrector, me pusieron preso por «instigador» de lo ocurrido durante aquellos días. Un disparate, pero fui preso. Ahora me acusan golpista porque opino diferente». Luis Ugalde, sacerdote jesuita, rector de la Universidad Católica y dirigente social, responde a las acusaciones del Presidente, «quien dice que le gusta discutir esas ideas. Pues yo estoy a la orden. En público o en privado»

Más allá de los señalamientos del Presidente («sacerdote golpista a quien se le fundió el cerebro»), ¿en qué radica la importancia de discutir a estas alturas de la humanidad si Cristo fue o no socialista? -La pregunta, «a estas alturas de la humanidad» debería ser «a estas alturas de Venezuela». Yo sé que Chávez es inteligente y por eso estoy absolutamente convencido de no cree en eso de que «Cristo fue socialista».

-¿Pretende, entonces, utilizar a Cristo para sus objetivos políticos?

-Chávez sabe que si hubiera dicho eso hace 30 años, en Cuba, le obligan a retractarse públicamente o lo ponen preso por una gravísima herejía. Lo que pasa es algo muy distinto. Aquí hubo una discusión sobre la legitimación religiosa de la Independencia. A la gente se le enseñaba, en el catecismo, iba contra Fernando VI, iba contra Dios. Entonces Gobierno está buscando una legitimación de ese tipo. Si Bolívar era socialista (evidentemente no lo fue), si Cristo también y usted va contra ese modelo, usted va contra Bolívar y Cristo. Chávez, en comunicación, nos da cien vueltas a todos. Él hace buenas asociaciones espontáneas. Asocia la palabra socialismo con amor, solidaridad, generosidad, Bolívar y Cristo. Quien se oponga eso es un malvado.

-Entonces, ¿ni Jesús ni Bolívar fueron socialistas y Chávez tampoco lo es?

-Ni Cristo ni Bolívar; y ciertamente el régimen que hay en el país tiene muy poco de socialista, por no decir que nada. -Chávez cita la Biblia para demostrar que Cristo sí fue socialista.

-Cristo no fue socialista porque el socialismo, si uno lo toma en serio, no es una simple denuncia contra la opresión humana, (denuncia que sí es cristiana), sino la búsqueda de una sociedad más justa y con igualdad de oportunidades. El socialismo es un intento histórico concreto por diseñar un modelo económico en la sociedad moderna, no en la antigüedad, que produzca, como dice Marx, abundancia, la eliminación de lo mío y lo tuyo y la desaparición de propiedad privada de los medios producción. Tanto para Marx como para Lenin uno de los obstáculos para conseguir tales fines era religión y el cristianismo. De manera que esos señores no reconocerían a Chávez como socialista.

-Y Fidel Castro tampoco.

-Tampoco. Y no lo reconocería si no fuera porque Cuba se está alimentando de Venezuela. Chávez tuvo toda la razón cuando dijo a los obispos que no sabían que era el socialismo del siglo XI y que debían leer a Marx y Lenin. Para éstos la religión y el cristianismo eran grandes obstáculos.

-Si para Marx y Lenin el cristianismo era un obstáculo («el opio del pueblo»), para Chávez la Iglesia debe resultar otro tipo de obstáculo.

-Lo cierto es que en ningún gabinete de Lenin o de Fidel estuvo un cristiano practicante. Sí los hubo en el de los sandinistas. Pero Nicaragua no construyó ningún socialismo. El llamado socialismo real eso era una herejía. En la socialdemocracia hay una revisión que le permitía a uno ser militante y creyente. En Cuba, hasta hace muy poco, eso era imposible y un cubano que fuera a misa no podía estudiar psicología o economía porque para eso hace falta «la visión científica de la vida», es decir, la materialista atea. Si por tanto usted pertenece al oscurantismo cristiano, está excluido. El Presidente, hombre inteligente, lo sabe y, como Fidel, tiene cualidad de cambiar las apariencias: Cuba es un gran fraude real y un gran éxito publicitario. Si Karl Marx resucitara en Cuba diría: «Si la clave del mundo moderno es la economía, en el fracaso económico es obvio». Y ya sabemos que si Cuba vivió a expensas de la URSS ahora vive de Venezuela.

-Para Chávez, antes que fracaso, ¿no es la revolución cubana un modelo a seguir.

-Los intentos por imponer el socialismo se remontan a hace ya más de un siglo. Y el debate debe centrarse en realidades: cómo operó en la URSS, China, Cuba. Una manera de sacralizar eso es no discutir los temas que interesan realmente: la construcción de una economía y de una sociedad con más empleo, igualdad y calidad vida.

-¿Y no era eso lo que, en definitiva, predicaba Cristo?

-Los cristianos, por serlo, no podemos aceptar la explotación o que haya ciudadanos de tercera clase. Debemos utilizar el talento para construir una sociedad inclusiva. Pero eso es socialismo. Ese es el esfuerzo. El socialismo es el medio y éste se mide para saber si sirve. Un cristiano no puede desear la muerte de un niño. Pero, ¿cómo se cura niño? Un médico le propondrá un tratamiento, otro le prescribirá remedio distinto.

-En América Latina muchos sacerdotes descubrieron en el socialismo un método, incluyendo la lucha armada, para remediar la injusticia y la pobreza.

-Yo levo 40 años en este debate y no me he retirado. En los 70, cuando se decía que la religión era el opio del pueblo, el movimiento de la Teología de la Liberación insurgió para decir que no. La teología cristiana auténtica no legitima dominación. La discusión de fondo está en cómo superar pobreza y eso no se logra sembrando utopías sino mejorando empleo, educación, salud. La pereza intelectual es inaceptable para el cristiano y por eso debe analizar sólo qué pasó con los países del socialismo real, sino qué pasó en Alemania, Noruega, Suecia. Hay que evaluar, guiarse por los hechos. Se trata de una discusión entre cristianos siglo XI sobre modos mejores para lograr en América Latina una sociedad más justa e inclusiva. En ese debate entra el socialismo. Muy distinto es decir «Cristo era socialista». Eso es un disparate.

-En ese debate, ¿no es un tema crucial el de la libertad?

-En la etapa de liberación (empleo, seguridad, bienestar) debe haber mucha más libertad expresión del pensamiento y pluralidad. Pero si me mete en ratonera cubana y me dice que no puedo leer una carta de mi mamá sin revisión previa del régimen; ver sino la televisión que me imponen y no puedo pensar sino lo ellos piensan, eso es una cárcel, no una etapa superior de la humanidad. En el siglo XIX ya Juan Germán Roscio demostró en su libro: “El triunfo de la Libertad” sobre el despotismo, escrito en la cárcel, que Biblia no legitima la opresión, sino que desata fuerzas espirituales para la humanidad crezca en libertad, igualdad y justicia. Decir que eso es socialismo resulta una manipulación.

-¿También lo es suponer que allí está el origen más remoto de las libertades y de la igualdad?

-Mucho antes de Jesús los profetas advirtieron que «Dios los va a vomitar de su boca porque venden al pobre por un par de sandalias». Una cosa es la denuncia y otra la capacidad de construir. Trotski escribió: «La igualdad pregonada por los cristianos nosotros la haremos realidad porque Marx descubrió unas leyes científicas que luego de curar la economía harán desaparecer el individualismo y el egoísmo». Ese fue el gran error y la razón del fracaso.

«Se lo digo con todo el respeto: el golpista es Él»

«En su afán de descalificar a quien opina distinto, el Presidente habla de un sacerdote golpista», refiriéndose a mí. Aunque no creo que esté tan mal informado. El sabe muy bien cómo es la cosa. Yo escribí contra el golpe del 92, ese que él dió y ahora glorifica. De manera que el golpista es él. No hay duda. Y lo digo con todo respeto. En 2002 él provocó el golpe y Luis Ugalde, 3 meses antes, promovió un documento de acuerdo nacional que no quisieron ni unos ni otros. Alí proponía un pacto social para los próximos 20 años, dentro de la Constitución, que planteara los cambios en paz. Ese acuerdo fue echado a papelera por algunos de quienes lo suscribieron y buscaron otro camino.

-¿Por qué dice usted que el Presidente provocó el golpe?

-¿No recuerda usted cuando el Presidente tomó un pito y por televisión despidió a los petroleros? Esa fue una provocación.

-¿Por qué provocar un hecho que lo derrocaría?

-Era una provocación. Con las intenciones no me meto. El hecho es que las cosas levaron adonde estamos. El Gobierno debe saber que para el 17 de marzo de 2002 fui a Chile y luego a España, Milán, Sicilia, Nápoles y Roma. Desde un mes antes estaba fuera del país cumpliendo mis obligaciones. Cuando regresé escribí un artículo, El golpe homeopático, criticándolo. No así les gusta o no que yo sea golpista. Es que no lo soy. -Le dicen golpista por el documento suscrito con Fedecámaras y la CTV.

-Ese es el documento que le mencionaba, elaborado para evitar lo que vino. El Presidente lo sabe. Sólo que si usted opina lo contrario de pienso, le digo que usted es un imbécil, ladrón o golpista y así desautorizo su palabra. No entro a discutir el contenido. Todo régimen que busque la perfección termina en dictadura El Evangelio no es para aprender economía, agricultura o medicina. El Evangelio es un maestro espiritual. Transmite una sabiduría vivencial que es importante para lo que hace usted con la vida. Lo demás lo aprende usted en otra parte.

Si Cristo o los profetas hubieran predicado sobre estos temas, que no lo hicieron, ya estarían superados por la realidad. Los utópicos piensan que sólo con estímulos morales usted puede construir la nueva sociedad. Y eso, ya se vio con la experiencia soviética, no es así. El estímulo material no es una necesidad sino la aceptación de la condición humana. Usted debe trabajar persona como es, no como debería ser. Todo régimen que busque la perfección termina en dictadura. La fuente de toda dictadura es creer que se pose el bien absoluto y que gracias a eso va a producir un mundo perfecto. Ese fue origen de la guillotina durante la Revolución Francesa. ¿Dónde está hombre nuevo soviético cuando luego de 80 años de dominación total y propiedad estatal. las mafias rusas surgieron la nomenklatura procedente del viejo régimen.

Dirección-E: [email protected]