LUZ: Universidad con aulas abiertas y arcas vacías

César Eduardo Pérez – Ante un presupuesto reducido en más de 500 millones para este año 2010, que además fue calculado sobre 12 por ciento de inflación, y un dólar a Bs. 2,15, el consenso es unir fuerzas para exigir los recursos que permitan el funcionamiento digno y en paz de la Universidad. “Esto es perfectamente viable –alega el rector de LUZ, Jorge Palencia- si consideramos que el presupuesto nacional se estimó sobre un barril de petróleo calculado en 40 dólares, que hoy se ubica cerca de los 70”.

-LUZ ha venido subsistiendo con un presupuesto nominal (el aprobado por el Ejecutivo) y un presupuesto real (al que se le aplican los ajustes por inflación).

Esta semana, las autoridades universitarias, encabezadas por el rector, se reunieron con gremios, estudiantes, cajas de ahorros y el resto de los organismos parauniversitarios, además de trabajadores de las dependencias medulares de la universidad, para contextualizar el problema presupuestario y las posibles soluciones que algunos sectores han visto como una fractura en la comunidad interna.

“El llamado es a la unidad, a hacer un frente común, a planificar acciones, a ubicar el foco, a impedir un cierre técnico de la Universidad. No es inteligente que nosotros mismos nos estemos enfrentando por reclamos que son justos, pero que son imposibles de honrar por completo, al mismo tiempo y en la forma oportuna como querríamos, cuando enfrentamos semejantes deficiencias. Es necesario desmentir esa matriz de opinión según la cual los recursos llegan y se quedan represados en las arcas universitarias.

El tesoro universitario está abierto a cualquier gremio para constatar cómo se han recibido los recursos y hacia dónde se han destinado”, explicó el rector.

Historia repetida

En el año 2009 la Universidad del Zulia solicitó al Ejecutivo nacional Bs. 1.438.153.124 como aporte para el ejercicio fiscal del año 2010. En ese momento, a pesar de haberse elaborado el anteproyecto con los lineamientos e indicaciones establecidos por la Oficina de Planificación del Sector Universitario, el Gobierno respondió con la asignación de la misma cantidad aprobada para el año 2009, es decir Bs. 788.963.801.

Esta asignación mantuvo como lineamientos algunos indicadores como la inflación (12%), el Impuesto al Valor Agregado (12%) y un diferencial cambiario en 2,15 bolívares por dólar. Sin embargo, al cierre del año 2009 la inflación se ubicó cercana al 30% y el diferencial cambiario, a partir de 2010, presenta una dualidad en Bs. 2,60 y Bs. 4,30.

Malabares

En los 15 meses de gestión de este equipo rectoral la situación del presupuesto se ha venido agravando. Conflictos con el gremio docente, con las cajas de ahorro, con el pago de los 22 días de antigüedad, retenciones del sector salud, de las cajas de ahorro, e insuficiencias presupuestarias no contempladas en el aporte del Ejecutivo, son detonantes que amenazan la paz institucional.

“La cláusula 34 de la convención colectiva Apuz-LUZ, donde se establece un mes de vacaciones a partir de la recepción total del pago del bono navideño, ha planteado un conflicto con el gremio docente en el año 2009 y reiterado nuevamente en el año 2010 que ha impedido el inicio de las clases antes del 29 de enero”, contextualiza el rector.

Según Palencia, la Universidad ha debido hacer “malabares” financieros para poder cumplir con el pago de salarios y compromisos con los trabajadores, pues los recursos no se reciben de manera oportuna. “Si nos hubiésemos ajustado estrictamente a que lo planificado acordara con lo ejecutado, en este momento estaríamos en un conflicto de grandes proporciones”, señala el rector.

“Nos ponen a cancelar en julio el bono de agosto cuando en julio no ingresa nada al tesoro por ese concepto. Nos ponen en la circunstancias promovidas a través del cumplimiento de un contrato colectivo a pagar en diciembre salarios antes de irnos de vacaciones cuando en ese mes aún no recibimos nada, y el bono navideño fue fraccionado como todos conocen”, puntualiza Palencia.

Paño de lágrimas

Otro enorme problema es el diferimiento de recursos contemplados para las cajas de ahorro y el sector salud. “La salud ha sido prioridad, pero las retenciones de diciembre quedaron en deuda, y es el 28 de enero de 2010 cuando se están pagando junto con el mes de enero, con recursos que acaban de ingresar al tesoro universitario”.

En los últimos 5 años, sólo estos 2 meses representan la deuda que la institución ha tenido con las retenciones del Instituto de Previsión de los Profesores (IPPLUZ) y de la Dirección de Servicios Médico-Odontológicos (SMO).

En la reunión, el rector expuso a todos los sectores que las cajas de ahorro y los proveedores de bienes y servicios se han convertido en un “paño de lágrimas” para las deficiencias de la Universidad. “En este momento tenemos una deuda acumulada con las cajas de ahorro por concepto de las retenciones de octubre, noviembre y diciembre”, precisó. Pero informó que se acaba de ordenar el pago de octubre, y anunció que noviembre se asignará esta semana y diciembre antes de finalizar febrero”.

Para el año 2010 el conflicto se agudiza aún más. “Según la misma convención colectiva hay que cancelar el concepto de 22 días de antigüedades en marzo. Esto significa que un conflicto está en puertas porque el presupuesto de 2010 no contempla el pago de este beneficio, y no hay posibilidad real de que la Universidad pueda cumplir con este concepto antes del 30 de marzo, aún cuando fuera negociado con los gremios, un beneficio que favorece también a los empleados administrativos”, refiere el rector Palencia.

La realidad, según explica el rector, es que estos recursos de un presupuesto deficitario son recibidos en forma no oportuna y “no tenemos cómo cumplir”. “Tenemos interés en contribuir al bienestar social de los trabajadores, sobre todo en nuestras cajas de ahorro y organismos de salud, pero yo quiero que entendamos que en estas circunstancias poder cumplir oportunamente con los compromisos, realmente escapa de nuestras manos debido a las graves deficiencias del presupuesto universitario”, indica.

“Hasta ahora, los malabarismos financieros han sido las vías que han servido a la Universidad para garantizar la seguridad social a sus trabajadores y prevenir conflictos. Por eso apelo a la sensatez, a nuestra condición de universitarios para que continuemos en la lucha por un presupuesto acorde con las necesidades de la Universidad, y a que conformemos un comando intergremial con el Consejo Universitario para que definamos las acciones, pues si nos dividimos sólo sale vencida la Universidad”, solicita Palencia.

¿Presupuesto insuficiente?

La vicerrectora administrativa, María Guadalupe Núñez, señaló que la crítica situación financiera es común para todas las universidades experimentales y autónomas. Además precisó que en la reunión con la Opsu realizada el 26 de enero de 2010, se presentaron las insuficiencias y se estudiaron las opciones que permitirán resolver los problemas que limitan el desarrollo de las instituciones de educación superior.
“En 2009 hubo una situación similar. Se hizo la presentación de las insuficiencias pero no se resolvió nada; incluso, un auxilio financiero que pudo servir para cancelar los 22 días de antigüedad fue deducido de los aportes de diciembre y eso agudizó la crisis financiera de LUZ, especialmente en relación con partidas destinadas a la seguridad, mantenimiento de infraestructura y servicios como seguridad, salud y comedores”, explica la vicerrectora Núñez.

“En el año 2009 se ordenó a la Universidad presentar a la Opsu las insuficiencias presupuestarias. En un principio el monto se ubicó cerca de los 165 millones de bolívares, luego fueron ajustadas en Bs. 90 millones, producto del recorte presupuestario del 6%; y después la Opsu solicitó a cada universidad que fueran sinceradas las insuficiencias por lo cual se ubicaron en un monto cercano a los Bs. 57,5 millones”.

El déficit presupuestario se agudizó con el impacto inflacionario de 2009 que generó deudas que aún en enero de 2010 se mantienen; a esto se une el monto autorizado por el Gobierno nacional para este año que no cubre las expectativas y se agrava con la devaluación y la superación del cálculo del índice inflación que superó el 12% (establecido por el Ministerio de Educación Superior) y cerró en 25,1%.

Presupuesto nominal vs. presupuesto real

Al respecto, el profesor Rafael Portillo, director del Planificación Universitaria de LUZ, señaló que la devaluación lo que hará es aumentar los ingresos producto de la renta petrolera, pero disminuye el poder adquisitivo de los venezolanos.

La Asamblea Nacional calculó en 2009 un presupuesto para la Nación estableciendo un precio del barril de petróleo en 40 dólares y hoy está ubicado cerca de los 70. Aparte, el diferencial era de 2,15 bolívares por dólar y después del 8 de enero se ubicó en 4,30 bolívares por dólar.

“No hay que ser un gran economista para saber que este año el tesoro nacional tendrá muchos más recursos. Además de esos recursos duplicados como producto de la renta petrolera al fisco ingresarán recursos de orden fiscal producto de las recaudaciones del IVA, el Impuesto sobre la Renta, los dividendos y colocaciones de la deuda pública. Es decir que el Gobierno tendrá recursos para lo cual LUZ debe exigir un mayor presupuesto que permita cumplir con todos los compromisos de la institución”, indica el titular de Planificación.

También señala el profesor Portillo que existe una “ilusión monetaria” en el caso del presupuesto. “Con los lineamientos del Gobierno nacional para elaborar el proyecto de presupuesto de LUZ todo parece indicar que cada año se va incrementando. Pero al aplicar el valor porcentual real correspondiente al indicador de inflación el presupuesto representa el mismo del año anterior y es una constante que se ha mantenido en los últimos cuatro años. Visto de ese modo tenemos entonces un presupuesto nominal (el aprobado por el Ejecutivo) y un presupuesto real (al que se le aplican los ajustes por inflación)”, puntualiza.

Sólo queda esperar por las alternativas que se propondrán y las soluciones que buscarán los diversos sectores de la Universidad para solventar los evidentes problemas financieros que requieren, de manera urgente, la aprobación de créditos adicionales.

Los gremios opinan

Aracelis Sánchez, Apuz: “La asfixia financiera hacia las universidades y el maltrato hacia los profesores se ha convertido en una política de Estado. No es justo que nos critiquen por la difensa de nuestros derechos cuando hay profesores que tenemos que financiar nuestras prácticas de campo, comprar reactivos o libros, porque no hay presupuesto”.

Omar Alvarado, Asdeluz: “Siempre hemos apoyado a la Universidad y estamos dispuestos a defender el presupuesto universitario donde tenga que hacerse, pero como trabajadores no renunciaremos a nuestros derechos adquiridos”.

Hebert Villalobos, Soluz: “Tenemos un acecho político y no le hacemos caso. Vamos a unirnos todos como universidad en la lucha por el presupuesto justo para la institución”.
Rafael Rodríguez, Capreluz: “Estamos de acuerdo con que la universidad no debe cerrarse. Debemos luchar en conjunto”.

Pablo Valera, Caproluz: “esperamos que las respuestas en el caso de las cajas de ahorro se den pronto”.

Víctor Ruz, FCU: “Si mantienen el presupuesto de 2009, para el 2010 la situación crítica se agudizará porque la experiencia indica que no se han aprobado partidas para renovar la flota de buses que debería estar en 45 aproximadamente y sólo están funcionando 24 para atender a unos 20 mil usuarios por día”.

Fuente: http://www.agenciadenoticias.luz.edu.ve/index.php?option=com_content&task=view&id=847&Itemid=154