Valencia, Alejandro Villalobos, (REDACTA).- Hay casos dramáticos: La Central Ureña, que procesaba caña de azúcar cosechada en Colombia no ha recibido materia prima para transformar. De aquel lado de la raya están los campos sin un destino cierto y, de este lado, una industrial en desuso.
Ese es sólo uno de los ejemplos que puede dar el presidente ejecutivo de la Cámara de Integración Económica Venezolano-Colombiana (Cavecol), Luis Alberto Russián. Otro: a mediados de octubre, mediante una comunicación, el Instituto Nacional de Salud Agrícola Integral ordenó la no realización de las inspecciones sanitarias para productos de origen animal y vegetal que vienen de Colombia, e involucra a los rubros que se importan en guacales o paletas de madera. Aunque se cumpla toda la normativa exigida, no hay inspecciones.
Russián, que participó en el foro “Presente y Futuro de las relaciones comerciales entre Venezuela y Colombia”, en la Cámara de Industriales, indicó que esa situación hace crecer la “creatividad” de las personas para hacer pasar la mercancía a este lado de la frontera. Al preguntársele si se fomenta el contrabando a través de esa medida, respondió: “Sí”. Recordó que la frontera es viva y altamente poblada.
Números negativos
Las exportaciones desde Colombia a Venezuela han caído 54% este año con respecto al anterior y las importaciones desde acá bajaron 25%. Russián calcula que a finales de 2009 el intercambio comercial se expresará en
-33%.
Mientras esto ocurre, Colombia busca mercados. El vecino país lideraba en 2008 el intercambio comercial, al exportar US$ 6.000 millones en productos y comprar sólo US$ 1.100 millones. El director de la Oficina Comercial de la Embajada de Colombia en Venezuela, Luis Fernando Fuentes, aclaró que ya han realizado ruedas de negocio en Brasil y en Guatemala, donde juntaron a 320 empresarios de Centroamérica. Preparan otra ronda con Estados Unidos y el Caribe.
Colombia definió ocho productos en los que pondrá mayor énfasis. Cuatro de ellos están establecidos en mercados internacionales: comunicación gráfica, energía eléctrica, autopartes, y textiles, confecciones, diseño y moda. Otros cuatro son nuevos: software y tecnología de información, tercerización de procesos de negocios, cosméticos y turismo de salud.
La oficina que dirige Fuentes tiene el objetivo de hallar los mercados y de captar inversiones. El programa de zonas francas es el que más llamó la atención en la exposición. El Estado colombiano ofrece lugares en los que se puede establecer industrias, que sólo pagarán 15% de rentas (la Ley establece 33%), no se pagan impuestos ni aranceles de importación, se logran beneficios por acuerdos internacionales y queda la posibilidad de participar en el mercado local, y allí el producto entraría como una importación al país.
“Muchos venezolanos ya se han establecido en esas zonas francas”, dijo Fuentes durante su ponencia. Entre 2006 y 2009, de 11 zonas que había, aumentaron a 66.
Nexos irrompibles
El presidente de la Asociación Venezolana de Exportadores (Avex), Francisco Mendoza, destacó los nexos sociales, educativos, culturales, familiares y comerciales que ambos países tienen desde hace 200 años y los declaró únicos e irrompibles.
El anfitrión, Andrés Pérez, presidente de la Cámara de Industriales, apostó -con reservas- a la reconciliación, rechazando el divorcio. “Veo difícil que si no hay un cambio ideológico pueda haber reconciliación, pero no quiere decir que seguiremos trabajando para conseguirla”, dijo para cerrar el evento.
Fuente: http://www.el-carabobeno.com/impresa/index.html
