Mujeres emprendedoras en los negocios

Las mujeres de hoy, valientes, trabajadoras, fuertes, con iniciativas y madres de familia, muchas veces madre y padre. Son el devenir de cada día. Ellas están en la búsqueda de un negocio que les sea rentable y mejore su calidad de vida.

Razones diversas han impulsado a estas mujeres al negocio como medio de vida. La situación económica del país, la pérdida de empleo, tiempo libre en algunos casos, el deseo de dedicarse a alguna actividad lucrativa, las llevan a lanzarse a la batalla de un crédito para iniciar una actividad que puede y tiene ganas de desarrollar.

Muchas mujeres sin una profesión definida ni título universitario, decide un día “yo si puedo”, y se lanzan al mundo del negocio, con la esperanza de alcanzar un nivel económico mejor y hacer realidad sus sueños. Miles de mujeres se han dedicado a un oficio que les resulte atractivo como medio de vida. Este tipo de mujeres forman parte de una creciente corriente en Venezuela, quienes han demostrado destrezas para llegar a tener una fuente de ingresos suficiente para ellas y sus familias.

Muchos son los lugares donde operan este tipo de “emprendedoras”, oficinas en sus casas, carretas en centros comerciales, páginas por Internet, elaboración de comidas o postres, confección de trajes de baño, bisutería, vitrales. Muchas son las “nuevas profesiones”, personas que tienen experiencia, conocen el mercado, pero no tienen documentos que avalen sus conocimientos.

El miedo a fracasar está incluido en el inicio de una nueva forma de trabajo. Luego de comprobar que se puede comenzar, surgen las inquietudes, el flujo de gente, los precios, serán los más competitivos, el mercado estará saturado, debo ofrecer calidad de servicio. todos estos obstáculos hay que vencerlos, hacer números y a trabajar con muchas ganas.

Muchos son los logros que existen hoy día en diversas actividades, porque una vez decididas a emprender su empresa, nada ni nadie las detiene, la tenacidad no tiene límites.

Existen infinidad de negocios que empezaron en la cocina de una casa, o arreglando la ropa de las amigas, o fastidiadas navegando en Internet, organizando fiestas, realizando manualidades. Todas han ido creciendo y hoy cuentan, algunas con franquicias, y otras con una empresa solvente, capaz de crear empleos.

En algún momento estas empresas fueron necesarias y no existían. Mujeres emprendedoras decidieron un día cambiar el rumbo de sus vidas. Innovadoras y decididas caminan por el rumbo hacia la eficiencia y la satisfacción de la meta alcanzada.

Fuente: El Universal