Noel Álvarez: “La inflación venezolana será la más alta de América”

El máximo organismo sectorial del empresariado del país, FEDECÁMARAS hizo un balance de 2009, a través de su presidente Noel Álvarez, quien es Técnico Superior en Administración de Personal y Licenciado en Administración Mención Recursos Humanos, además de haber sido presidente de CONSECOMERCIO y otras organizaciones.

Para Álvarez, “el 2009 cerrará con una inflación por el orden del 32%, mientras que el PIB mantendrá una caída por el orden de 2,7% y el próximo año se prevé una caída de 2,3%”.

En lo referente al desempleo el Licenciado manifestó que desde FEDECÁMARAS se estima que cierre en un 8,5%.

El organismo gremial estima que la inflación cierre con 32,1%, siendo así la más alta de América; pero, si esto es desalentador, más es que prevén para el 2010, un índice inflacionario de 40 a 45%.

Los temas que más preocupan al empresariado, según hizo saber Álvarez, son: la seguridad jurídica, la confiscación de empresas y ocupación de fincas, ya que todo esto no contribuye en nada al desenvolvimiento sano y sostenible de la actividad productiva del país.

El Empresario también destacó que el empresariado privado nacional, “está comprometido con los problemas de sus trabajadores y de la comunidad”.

Para el líder de FEDECÁMARAS, los conflictos laborales han hecho que disminuya la producción nacional y también las demoras por parte de CADIVI para entregar las divisas.

Señaló Álvarez que: “Bien es cierto que disminuyó el número de importaciones, también lo es, que dejamos de depender de Colombia, para ahora hacerlo de Brasil y Argentina, en vez de estimular el aparato productivo interno.

En referencia a los servicios públicos dijo que: “el año 2009 cerrará con un colapso de los mismos por la caída en las inversiones oficiales, lo que obligó al racionamiento de agua y energía eléctrica en el país”.

Otro punto que tocó, y de gran interés, es la preocupación del empresariado por la cantidad de secuestros y la impunidad con la que quedan estos hechos delictivos, ya que el Gobierno, no controla la seguridad de sus ciudadanos y tampoco castiga, de manera ejemplar, a los autores de estos actos delictivos.

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