Parque Nacional Laguna de Tacarigua (*)

La Laguna de Tacarigua se encuentra ubicada en la región de Barlovento, en el estado Miranda. Fue decretado Parque Nacional en 1974. Se puede llegar a este Parque Nacional por carretera, siguiendo la vía de Higuerote a Río Chico y una vez que se haya pasado San José y Río Chico, se sigue una carretera asfaltada que da hacia la Laguna de Tacarigua.
En sus inmediaciones, existen numerosas zonas balnearias con todo tipo de facilidades, incluidos servicios de lanchas para hacer excursiones hasta el interior de la laguna. Se debe cancelar a Inparques el impuesto de entrada al Parque Nacional Laguna de Tacarigua, el cual es de Bs. 500 para los adultos y Bs. 250 para los niños, mientras que la excursión en lancha varía, dependiendo del número de personas a transportar, (aprox. Bs. 14.000 para un grupo de 4 personas). Durante el recorrido, se pueden ver las dos entradas, una en Boca de Tacarigua y la otra en Madre Vieja, hacia las que los tour operadores organizan excursiones y campamentos. Esta laguna costera, de 30 kilómetros de largo por 6 de ancho, enclavada entre los ríos Cúpira y El Guapo, tiene en su extremo una larga y solitaria playa, a pesar de la creciente ocupación urbanística vacacional en sus inmediaciones.
Por su cercanía a la Capital, toda esta región es una zona con bastante afluencia de turistas, que acuden a ver sus formaciones de manglares, con gran cantidad de avifauna y fauna ictiófaga. Durante años fue un centro de pesca artesanal importante.
Aquí, una de las playas más interesantes es Playa Miami. Otrora playa nudista hace más de 15 años; esta playa se ha convertido en un destino ideal para turistas y familias que desean alejarse un poco del ajetreo, causado por la gran cantidad de gente que se dá cita en el resto de las playas de la región de Barlovento, disfrutando de una inmensa playa con un oleaje un poco fuerte, pero con ambiente familiar.
Para llegar a Playa Miami es necesario utilizar un servicio de lanchas (peñeros), que recorren gran parte de la laguna a través de un paseo en donde el turista no sólo puede admirar el paisaje, sino que si corre con suerte, al final de la tarde, puede disfrutar del espectáculo que representa la llegada de los miles de aves que se posan en los diversos manglares que conforman esta laguna. En esta playa existe una sola opción de alojamiento: el Hotel Club Miami, el cual fue construído hace más de 50 años por unos arquitectos búlgaros y que hoy representa una muy modesta opción de albergue, con unas doce habitaciones disponibles con los servicios más básicos (habitaciones con cama matrimonial, una cama individual, ventilador y baño privado). También, poseen unas cabañas que actualmente no están disponibles, ya que fueron afectadas por los hechos acontecidos en diciembre de 1999. Sin embargo, si usted es un turista de los que busca es disfrutar con su pareja, amigos y/o familiares de una playa de ensueño casi reservada solo para usted, bien puede considerar el alojarse en el Hotel Club Miami, que le ofrece además de hospedaje, un pequeño restaurant en donde podrá degustar una comida a base de pescados de la zona, un área de bar en la playa, así como toldos y sillas de extensión.
El manglar rojo, negro, blanco y botoncillo conforman la principal forma vegetal de la zona, contemplada con cocoteros, uveros de playa y una gramínea llamada saladillo en los lados playeros.
Las aves acuáticas suponen el principal elemento animal. Tijeretas, pelícanos, cotúas, flamencos, garzas blancas y corocoras, gaviotas y playeros se combinan aquí con pájaros de la sabana arbustiva, como el sangre de tordo, el chitiro de chaparrales, el cristofué, la reinita, el tordito, el gonzalito, el tordo maicero y el chocolatero. La variedad de peces, que aprovechan el mangle para el desove, es enorme, sobre todo el lebranche, la lisa, el róbalo, la mojarra, el lenguado, el roncador, la curvina, la raya, el sábalo y la muñama.

(*Tomado de VenezuelaTuristica.com)