Pérdida de los Valores

Me causó mucha tristeza observar a la gran cantidad de jóvenes con los vasos de licor o latas de cerveza en sus manos.

Tanto mujeres como hombres tomando a «pico de botella». Parecía que se les iba a acabar la bebida y tenían que tomar de prisa.

Existen montones de lugares en los cuales se les vende licor a menores de edad. Personas inescrupulosas a las cuales lo único que les interesa es hacer dinero mediante la venta, sin importarle el daño que les están ocasionando a esos jóvenes y a sus familias.

Otro ejemplo que me erizó los pelos, fue cuando escuché a un grupo de jóvenes contar que en la institución en la cual estudian, algunos compañeros hacen negocio vendiéndoles licor a sus compañeros y que los profesores no se enteran.

Me pregunto: ¿Y cómo hacen con el olor a licor y sus efectos? ¿Es qué los profesores no se dan cuenta o se hacen la vista gorda?

También contaban, como algo muy divertido, que habían tenido relaciones sexuales y, hasta una de las muchachas hizo el comentario de que, si sus padres se enteraran se morirían, porque para ellos ella es «una santa paloma».

Todo lo anterior lo comento con el afán de hacer conciencia, en que lo que está sucediendo se debe a la pérdida acelerada de valores, y que lo estamos experimentando en nuestra y muchas otras sociedades.

Hace varios meses Grupo Daion, S.A., como uno de sus principales propósitos, ofreció a varios centros educativos del país, dar charlas, seminarios, talleres de motivación, auto-liderazgo, valores humanos, sin costo
alguno, con el fin de rescatar los valores que día a día se alejan más y más de nuestra juventud. También se les ofreció realizar el mismo trabajo con los padres de los estudiantes.

La respuesta que recibimos fue que iban a considerarlo; que iban a consultar con los padres. Les dijimos que nuestra inquietud nació gracias a que varios jóvenes nos habían solicitado ser parte del mejores seres humanos y que entendíamos que, si ellos nos lo pedían, era porque sentían que lo necesitaban. O sea, están pidiendo ayuda a gritos. Uno de los comentarios que nos hizo un adolescente fue, que no tenía deseos de vivir, que por eso él tomaba licor y fumaba. Una de las muchachas dijo que ella no soportaba llegar a su casa, porque no deseaba ver a sus padres.

Todavía estamos esperando la respuesta a nuestro ofrecimiento, sólo deseamos dar un pequeño aporte a esta sociedad que tanto lo necesita. Por favor abramos nuestros corazones, entendamos que los jóvenes de hoy, tendrán en sus manos el futuro de nuestro planeta Tierra. ¡SI! de nuestra Tierra.

Dejemos la indiferencia a un lado, no sabemos si uno de esos jóvenes que pide ayuda a gritos es nuestro hijo.

Instruye bien a tu hijo, y será el descanso y las delicias de tu alma (Proverbios 29,17).

Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo.
Honra a tu padre y a tu madre (que es el primer m a n d a m i e n t o c o n
promesa) para que te vaya bien y vivas largo tiempo sobre la tierra. Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en la disciplina y la instrucción del Señor. (Efesios 6,1-4).

(*)Motivadora – Costa Rica
Dirección-E: [email protected]
Blog: www.adrianamorahamblin.blogspot.com

Imágenes extraídas de: www.seridec.com