Según KPMG: Se reducen los modelos de negocios de los bancos en la pospandemia

El sector financiero está en proceso de transformación para enfrentar distintos factores, como el cambio de comportamiento de los clientes, la intensificación de la competencia, los efectos económicos adversos, entre otros.

A partir de la pandemia, muchas actividades se están viendo forzadas a adaptarse a nuevos escenarios.

Una de ellas es la industria financiera, que se encuentra en proceso de transformación para enfrentar distintos factores, como el cambio de comportamiento de los clientes, la intensificación de la competencia, los efectos económicos adversos, entre otros.

Así lo indicó KPMG en un informe, el cual señala que la banca minorista enfrenta un panorama complejo.

Los bancos minoristas deben evaluar qué modelo de negocio adoptarán a futuro y qué deben hacer para lograrlo. Los cambios que estamos viviendo hoy son de gran alcance: los bancos deben actuar con decisión para hacer frente a los desafíos que se avecinan, afirmó Ricardo Anhesini, socio líder de la industria de servicios financieros de KPMG en América del Sur.

El informe sostiene que los efectos de la pandemia en el mercado terminarán generando un cambio estructural permanente en la banca minorista.

En ese sentido, prevé que los cinco modelos bancarios principales (bancos de servicio completo, especializados, proveedores de crédito al consumidor, proveedores de transferencia de dinero y proveedores de billetera digital), en el futuro inmediato se reducirán a tres modelos de bancos: universales, centrados en transacciones y «ambientales».

Al respecto, indica que los márgenes de los bancos universales están comprimiéndose a partir de altos costos operativos y una fuerte presión a la baja tanto en las comisiones como en los ingresos por intereses.

Para mejorar su rentabilidad y ser más eficientes en costos, los bancos universales deberán apoyarse más en los datos transaccionales y desarrollar un ecosistema propio en función de su base de clientes, señaló el trabajo.

El mismo indica que la capacidad de los bancos en utilizar estos datos será crucial para alcanzar una mayor comprensión del comportamiento de sus clientes y detectar así nuevas oportunidades.

«Si bien este grupo de bancos mantendrá una red de sucursales para atender a los segmentos de mayor rentabilidad o a aquellos que deben interactuar en persona, el modelo operativo necesita automatizarse en un alto grado para impulsar la rentabilidad», agregó.

En cuanto a los bancos centrados en transacciones, que son principalmente proveedores de servicios de pago, «están enfocados en el concepto de ‘economía unitaria’, y deben procurar que el costo unitario de las transacciones sea cubierto por los ingresos para poder garantizar una rentabilidad sostenida».

Asimismo, según KPMG, adoptan un modelo altamente enfocado en segmentos específicos de clientes y buscarán innovar constantemente su oferta y aprovechar las posibilidades creadas por la banca abierta.

Respecto a los «ambientales», el informe señala que, en lugar de ser entidades independientes, estos operan como «agentes invisibles» integrados a la Internet de las cosas (IoT) mediante dispositivos de uso diario que facilitan las transacciones y las habilitan a profundizar su conocimiento sobre el comportamiento del cliente.

«Esta clase de banco es un facilitador de ecosistemas, y está enfocado en la construcción y provisión de APIs, microservicios y arquitectura de tecnología basada en módulos», afirmó.

KPMG sostiene que las entidades financieras que invierten en un conjunto de capacidades conectadas tienen el doble de probabilidad de ofrecer una experiencia que supere las expectativas del cliente y diferenciarse de la competencia.

En ese sentido, afirma que el enfoque deberá estar centrado en el cliente, en el que «tanto el front, el middle como el back office estén alineados, creando así valor comercial e impulsando un crecimiento sostenible».

Actualizado el 22/03/2021: Finanzas y Mercados

Imagen de Gerd Altmann en Pixabay