Turismo en Venezuela y América Latina

Nuestras bellezas naturales no son suficientes

Según datos de la Organización Mundial de Turismo, México es el único país de la América Latina que se ubica entre los 10 primeros países receptores de turistas a nivel mundial, de acuerdo a datos del año 2010. El listado está indudablemente encabezado por Francia, que recibe 76 millones de turistas al año. En el 2010 México habría recibido una cantidad total de 22,4 millones de turistas, que dejaron en el país ingresos calculados en cerca de 12 mil millones de dólares.

Ubicados exclusivamente en el contexto de la América Latina, México es el país líder en materia de turismo, seguido de Argentina, que recibió en el año mencionado un total 5,3 millones de turistas. Le sigue de cerca Brasil, con 5,1 millones de turistas. En cuarto lugar se ubica República Dominicana, que aun siendo un país demográfica y geográficamente pequeño, recibe 4,1 millones de turistas al año.

Venezuela se encuentra en este ranking latinoamericano en el anteúltimo, lugar, pues recibió 615 mil turistas en el año 2010, según los datos del organismo mencionado. Solo Paraguay tiene en la región una recepción menor de turistas, pues sólo recibe 465 mil. Incluso los países centroamericanos, que son más pequeños y más pobres, reciben más turistas anualmente, tal como sucede con Honduras con 895 mil turistas, El Salvador con 1 millón 150 mil, o Nicaragua, con 1 millón 712 mil.

ESTADÏA GRATA

¿A que se debe esta recepción tan modesta de turistas por parte de un país con tanta belleza natural como Venezuela? La primera línea de respuesta es que las bellezas naturales son una condición quizás necesaria, pero nunca suficiente para atraer de por si a una gran cantidad de turistas. Playas hermosas, con aguas cálidas y transparentes las hay por doquier en toda la geografía del Caribe. El turista europeo, norteamericano o asiático irá a aquel país que tenga playas hermosas; pero que, además, le asegure que desde que entra al país, en el aeropuerto de llegada, hasta que se va, su estadía será grata y segura.

Los turistas -excepto aquellos que buscan aventuras y experiencias peligrosas y excitantes- no gustan de ir a un país donde la delincuencia mata todos los años a varios miles de ciudadanos nacionales y extranjeros. Entre un país con hermosas playas caribeñas, y con seguridad ciudadana, y otro sin seguridad alguna, el grueso de los turistas preferirá el primero. Por eso es que el turista que quiere sol y playa va a República Dominicana, o a Cancún en México, o a Aruba; o incluso a Cuba, pero sólo en muy pequeña medida se arriesga a venir a Venezuela.

Otro aspecto importante a la hora de decidir qué país visitar, es el problema de la tasa de cambio. Si el turista se entera de que hay varias opciones en ese campo, algunas legales y otras no tanto, unas a un precio y otras a precios radicalmente diferentes, unas a la cual todas las compras le saldrán carísimas y otras en la cual los recuerdos turísticos le saldrán a un precio bastante seductor; unas sin riesgo alguno y otras con riesgo de ir a la cárcel y pasar un mal rato, entonces seguramente preferirán un país con tasa de cambio libre, donde comprar o vender divisas o moneda nacional sea tan normal como comprar pan.

INFRAESTRUCTURA

Otras variables que son importantes a la hora de decidir qué país visitar, son el estado de las carreras, el respeto de los horarios por parte de los aviones y de las líneas de buses, la infraestructura hotelera y todos los servicios conexos al turismo, como excursiones, restaurantes, taxis, etc. No es malo que se hagan ferias costosísimas para promover el turismo en Venezuela, pero si un peñero se extravía en su recorrido, por las islas cercanas a Margarita, con varios turistas extranjeros a bordo y no tiene GPS, ni brújula, ni radio, ni luces de bengala, entonces todo el posible impacto positivo de la feria internacional se ve violentamente contrarrestado. Igual, si se asalta o se mata a un turista extranjero en cualquier lugar del país. O, incluso, si esas cosas no suceden muy seguido, pero se difunde internacionalmente que esas cosas pueden suceder, el impacto sobre el flujo de turistas es igualmente negativo. Porque la mala imagen-país tiene un costo elevado, en términos de alejar a los turistas y a los millones de dólares que ellos suelen dejar en los países que visitan.

Blog: sergio-arancibia.blogspot.com