Venezuela en el MERCOSUR: desafíos y oportunidades

La salida de Venezuela de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y del Grupo de los Tres (G3), impulsará la formalización de la entrada de este país al Mercado Común del Sur (Mercosur), lo que afectará negativamente a la agroindustria nacional y provocará un aumento de 35% en el precio de los productos que no provengan de esta unión aduanera, según lo expresó el internacionalista Italo Luongo, en una conferencia dictada en las instalaciones de la Cámara de Comercio de la ciudad de Valencia.

Luongo explicó que el arancel externo común que deben pagar los países que integran el Mercosur es de 35%; por ello, cuando Venezuela logre formar parte de ella definitivamente, sus habitantes tendrán que cancelar un precio mayor al que existe actualmente por productos como computadoras, celulares, cámaras digitales, equipos de sonido y aquellos de la línea blanca, pues estos no se fabrican en los países que conforman la unión aduanera: Paraguay, Uruguay, Argentina, o Brasil.

Según este internacionalista, el Mercosur se vislumbra como una opción de integración comercial ante la salida de Venezuela de la CAN; sin embargo, considera que la economía venezolana no se encuentra al mismo nivel de naciones como Brasil y Argentina, que representan una potencia industrial en América del Sur. “Las industrias venezolanas no pueden competir con productos brasileros, argentinos y hasta uruguayos en algunos rubros” porque estos son más económicos, expresó Luongo.

Refiriéndose a Carabobo, señaló que “la industria automotriz de este estado está condenada a desaparecer”, porque los vehículos producidos en Brasil y Argentina son más económicos que los venezolanos. De esta manera, bajo la figura del Mercosur, los carros fabricados en esos países podrán ingresar al territorio nacional sin pagar impuesto y desplazarán del mercado a aquellos producidos en Venezuela. Asimismo, indicó que el sector agroindustrial de este país se verá perjudicado con la entrada al Mercosur, porque las naciones que integran esta unión aduanera son las principales exportadoras de carne en Suramérica y como consecuencia la industria venezolana no podrá competir con ellas.

Por otra parte, Luongo opinó que Venezuela al separarse del G3 y la CAN, lo está haciendo de sus principales socios comerciales, después de Estados Unidos, es decir, de Colombia y México. Agregó, que con esta medida los productos venezolanos que se exportaban, pasando por México, hasta llegar a Canadá y Estados Unidos, no podrán seguir ingresando de esta manera a esas naciones.

Luongo manifestó que las razones que justifican la salida de Venezuela de la CAN y el G3 responden a factores políticos. “Estamos en una etapa que no se toman decisiones pensando en lo económico sino en lo político”. Asimismo, expresó que el proceso de integración comercial denominado Alternativa Bolivariana para la América (ALBA) “no es un proyecto económico” sino “una idea política del gobierno venezolano”, y apuntó que el criterio para formar parte de esta unión de países es “no asociarse con Estados Unidos”.

Según Luongo, el beneficio del ALBA estaría en que sus integrantes, es decir, Cuba y Bolivia, adquirieran productos venezolano, pero “ellos no tienen con qué pagarnos y nosotros les damos los créditos para que ellos mismos nos compren; los estamos financiando”, dijo.

Control de cambios, importación y exportación
“Ni el control de cambios ni el control de precios son incompatibles con la participación en un acuerdo intergubernamental como el Mercosur, siempre y cuando no se conviertan en políticas discriminatorias”, que nieguen u otorguen dólares sólo para la importación de ciertos productos, y controlen el precio de algunos bienes mientras se libera el de otros, según expresó el doctor Sergio Arancibia al referirse al intercambio comercial dentro de la esta Unión Aduanera a la que pertenecerá Venezuela.

Arancibia explicó que la entrada de este país al Mercosur permitirá el acceso de los bienes nacionales al mercado de Brasil y Argentina, con lo cual aumentará la producción y el empleo en Venezuela; pero asimismo, dijo que para ello se requiere mayor inversión en las industrias, así como mejoras en los niveles de competitividad, la calidad de las mercancías y los mecanismos de comercialización.
De igual forma, explicó que los productos provenientes de Brasil y Argentina, en el área agrícola, agroindustrial y manufacturera, podrán ingresar sin obstáculos al mercado venezolano, razón por la que “se desplazará a ciertos empresarios menos competitivos, así como a las mercancías originarias de otras regiones del mundo”.

Por ello, Arancibia considera importante que los empresarios, ante la entrada inminente de Venezuela al Mercosur, discutan entre sí y generen debate con el Gobierno Nacional y los parlamentarios a fin de tratar los temas que han quedado sin evaluar, los cuales en su opinión son numerosos. En segundo lugar, sugiere que se estudien a fondo los desafíos y oportunidades que traerá esta Unión Aduanera para cada industria.

Éstas “deberían estar estudiando el mercado del Mercosur (…), viendo los nichos a los cuales puede llegar con su producción, los competidores que van a llegar al mercado venezolano, los precios y las calidades de la competencia y los cambios que tiene que hacer en su propia empresa para enfrentar toda esa nueva situación”, dijo Arancibia.

Por otra parte, manifestó que el Acuerdo de Complementación Económica (ACE 59), al cual pertenecía Venezuela junto al resto de la Comunidad Andina (CAN), brindaba plazos más amplios para la desgravación arancelaria y la adaptación a la competitividad, pero “no implicaba la adhesión ni la participación en todos los otros aspectos que guían al Mercosur, que en definitiva es un bloque político-económico que pretende tener mayor voz y participación en los grandes foros y debates mundiales”.

En este sentido y para finalizar, Arancibia opinó que, “a esta altura de los tiempos”, a los empresarios “lo que les queda es mirar hacia delante y no hacia atrás”, “prepararse con todos los hierros para enfrentar los desafíos que implica formar parte del Mercosur”.