No han corrido buenos tiempos para Twitter en los últimos meses y si bien creíamos que los esfuerzos de Jack Dorsey iban a hacerle levantar el vuelo, parece que está a punto de suceder más bien lo contrario.
El culpable se llama Mastodon, una red social que llega dispuesta a competir directamente con la plataforma del pajarito y que tiene muchas más armas para acabar definitivamente con ella.
Se trata de un red creada por Eugen Riochko y que permite a los usuarios crear cuentas, seguir a otros usuarios o actualizar estados.
En cierta manera puede parecer similar a Twitter pero, a diferencia de la compañía de Dorsey, Mastodon cuenta con mejores controles de privacidad y los mensajes de odio están explícitamente excluidos.
Se trata así de un software de código abierto conocido como “GNU social” y no parece que Rochko tenga intención de monetizar los datos de los usuarios. De hecho, el proyecto ha sido financiado a través de Patreon, un servicio de micropagos a creadores.
“No estoy interesado en la monetización, la publicidad o este tipo de cosas”, aseguraba el creador en Github.
En cuanto a la apariencia de la red social, tiene sin duda numerosas similitudes con Twitter aunque los usuarios de Mastodon pueden enviar no tuits sino “toots” de 500 caracteres a diferencia de los 140 de la plataforma del pájaro azul.
Además, estos “toots” pueden marcarse como privados o públicos de manera individual así como etiquetar los posts con una “advertencia de contenido” que esconde parte del mensaje y solo se muestra cuando otro usuario decide verlo.
Otra de sus particularidades es su ADN descentralizado. Esto significa que, de la misma manera que un usuario de Gmail puede enviar un correo a uno de Yahoo, los usuarios de Mastodon pueden comunicarse entre ellos independientemente del servidor que utilicen y que se pueden ir excluyendo en función de la privacidad que desee el usuario.
De esta manera, el servicio ofrece a los usuarios crear su propia zona de seguridad, una cuestión cada vez más importante para éstos y que Twitter no ha conseguido todavía.