ANGEL GARCÍA BANCHS | EL UNIVERSAL. El 19 de septiembre de 2013 en el Foro de Perspectivas 2014 de Econométrica (www.econometrica.com.ve) lo explicaremos al detalle; pero, les adelanto por ahora que, de venir un nuevo mercado de permuta para la adquisición de divisas vía el uso de títulos, no sería libre, sino con racionamiento y, por tanto, no resolvería el problema primordial: no contendría la escasez de divisas y bienes, por lo que persistiría el mercado negro y la alta inflación.
En verdad, el Gobierno ya no halla en qué palo ahorcarse. Son extremadamente fuertes los dolores de cabeza por el dólar, elemento del deseo de una economía como la venezolana, la de un país en transición política con alta inflación, desinversión e incertidumbre.
Ahora corre el rumor de que vienen con una nueva permuta. El problema es que, a diferencia del pasado, esta vez viene sin músculo. Es decir, ahora viene sin dólares, además de con mayores desbalances, menor inversión, y una demanda represada mayor.
No es lo mismo un mercado de permuta como el que duró hasta el mes de mayo de 2010, que contó con 40 mil millones de dólares en quema de reservas y nueva deuda en divisas, a uno que cuente con absolutamente nada. Para entonces, el Gobierno tenía los dólares, por lo que acomodó la demanda hasta que a mediados de 2010 se acabó todo y colapsó; mientras que ahora, los dólares brillan por su ausencia, por lo que todo será un bluff.
Así, lo que quedan son dos opciones, si en verdad ha de reaparecer pronto dicho mercado. En primer lugar, está la opción poco probable de que sea el propio sector privado (el propio mercado) el que determine la tasa de cambio (el precio del dólar), en cuyo caso el mercado negro desaparecería inmediatamente, al pasar a ser legal, lo que significaría la independencia del sector privado de las divisas del Estado, al poder exportar, algo que los comunistas y mafiosos no permitirán. Y, en segundo lugar, está la opción que escogerán, que será el establecimiento de un mercado de permuta controlado, con limitaciones, carpeticas, planillas, y racionamiento, y un tipo de cambio bajo y artificial. En este caso, el mercado negro persistirá, y no se contendrá la escasez y la inflación.
El 19 de septiembre, lo anterior, al detalle, lo vamos a explicar.
@garciabanchs
Fuente: http://www.eluniversal.com/opinion/130909/permuta-sin-musculo