Salvemos la democracia… No hay descontento, por justificable que sea, que pueda equipararse con el temor de una involución fatal de nuestra democracia
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A pesar que existe gran desconfianza por la designación ilegitima de los rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) y de que se ha venido hablando que su programa electoral electrónico está diseñado -por el G2 cubano- de una forma tal que siempre garantice el triunfo del régimen.
Todo venezolano mayor de18 años debe ir el 21 de los corrientes a votar a los centros de votación, donde hay un momento, a la hora de votar, en el que el votante está sólo con su conciencia. Al pararse la persona en el cubículo y buscar la(s) casilla(s) en la que va a marcar la ‘x’, para escoger el(os) candidato(s) de su elección, debe preguntarse: ¿por qué estoy votando por ese(os) candidato(s) o ese(os) partido(s)?;¿ me ofrecieron algo a cambio?; ¿me están presionando para que lo haga? o ¿estoy haciéndole un favor a un amigo?
Votar es un derecho que tienen todos los venezolanos mayores de 18 años de edad y, por ende, son completamente libres de hacerlo por quien(s) quiera(n).
Pero también es un deber. Nuestra responsabilidad con la familia y con el país es votar por quien verdaderamente se cree que es la mejor opción y no por las razones equivocadas. El votante debe recordar que cuando está solo en el cubículo nadie va a estar allí para decirte por quien ha de votar. Está sólo con su conciencia. Él también ayuda a construir o desrruir la democracia.
¿Por qué es importante votar?
“Venezuela vive un momento difícil, complejo, con una crisis humanitaria progresando, la economía estancada y la situación política se ha agravado. Y allí es donde toma relevancia el análisis que realiza permanentemente el Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica “Andrés Bello”, revisando los escenarios para luego ofrecer rutas de acción para el cambio”, señaló el Rector Virtuoso al dar la bienvenida a los panelistas y a los más de 200 participantes de organizaciones civiles y medios de comunicación que se conectaron vía Zoom.
De acuerdo con los resultados de dicha investigación, el 84,1% sigue considerando muy necesario o necesario el cambio de gobierno y un 36,9% piensa que elecciones justas/votar constituyen el mecanismo para lograr ese cambio Otras opciones como la intervención o el golpe militar, apenas fueron consideradas por 5,7 % de los encuestados. “Lo electoral es algo importante y la ciudadanía quiere que se atienda”, una de las conclusiones de los resultados.
No se puede dar por hecho la democracia. El derecho a votar es una de las libertades más importantes como individuos. Garantiza que se tiene voz y que las voces se escuchan. Se debe defender la idea de la democracia, y una de las mejores maneras de hacerlo es votando en las elecciones del 21 de los corrientes.
En un mundo que está cada vez más globalizado, donde se está más conectados que nunca más allá de las fronteras, existen algunos problemas que sencillamente no se pueden resolverse en solitario, para el cambio deseado se debe buscar apoyo de organismos internacionales.
El voto es una condición necesaria para que un sistema político sea democrático. La transición política desde sistemas autoritarios hacia una democracia, tarde o temprano, deberá seguir la vía de unas elecciones libres con sufragio universal desde la constitución.
En la política, se usa el voto para que los electores elijan a los miembros del gobierno u otros cargos públicos; así como a concejales y diputados. Venezuela establece sus propias normas y mecanismos sobre la manera en que se efectúan las distintas elecciones, de acuerdo a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV).
El voto es una condición necesaria para que un sistema político sea democrático. Hay gobiernos autoritarios en los cuales las restricciones para la presentación de las candidaturas alcanzan un grado que impide considerarlos democráticos.
Las elecciones no se celebran exclusivamente en sistemas políticos democráticos. Hay sistemas autoritarios que, conscientes de su incapacidad de forjar legitimidad -caso Venezuela-, se sienten tentados a recurrir a las elecciones, las cuales tienen un carácter plebiscitario -con procesos automatizados amañados- y se desarrollan sin garantías de limpieza democrática que soslayan las violaciones sistemáticas, y generalmente virulentas, de las reglas de juego inherentes a las democracias.
Las elecciones en una dictadura y en una tiranía (caso Venezuela) anulan, crean obstrucciones de gran calibre o son beligerantes con la conducta competitiva partidista. La confrontación partidista es reemplazada por la omnipresencia de un partido único (caso Cuba), o bien, por amagos de diversidad con la presencia de candidatos supuestamente alternativos porque, al fin y al cabo, se entiende que este tipo de elecciones en ningún caso afectarán a quienes detentan el monopolio del poder.
Sin duda, el voto es la herramienta de participación ciudadana más importante de toda sociedad, no sólo como una expresión política, sino también para determinar quién se quiere que la gobierne.
En el caso del sufragio obligatorio, es fundamental para la vida social y democrática, precisamente porque el desencanto generalizado hacia los políticos podría generar un marcado ausentismo. Además, para muchas personas, el voto es el único acto en que se sienten ciudadanos.
El proceso electoral tiene como protagonista a un país entero y toca un aspecto clave de su vida: la representación política del pueblo en órganos de dirección del Estado.
La poca participación de votantes en las próximas elecciones en Venezuela sería “ventajosa” para el actual régimen totalitario.
Venezuela requiere de un cambio. Si se quiere cambio, hay que ir a votar.