Definitivamente los conductores del país nos han hecho tanto daño, que nos hacen peligrar nuestras tradiciones. La inflación te obliga a que, si te comes tu plato navideño no puedes estrenar o viceversa.
La Navidad para muchos venezolanos será distinta este año, pues muchas familias tuvieron que recortarse con las tradiciones de estas fechas.
Por todos es conocido que en la actualidad la situación económica es muy distinta a las de otros años. Un maestro o un profesor, con el dinero que ganaba como fruto de su trabajo, podía viajar, con las utilidades podía hacerle arreglos a la casa pero ahora no puede ni pintarla.
Y cuando la familia es grande es dificil comprar sus estrenos, lo que gana el grupo familiar común no permite comparle vestimenta y zapatos a cuatro o cinco niños.
Esa es la realidad, están acabando con nuestras tradiciones.