Estas habilidades pueden incluir la inteligencia emocional, la capacidad para comunicarse de manera efectiva, la empatía, la capacidad de escucha activa, la resiliencia y la capacidad de resolver conflictos.
Anónimo
La competencia personal y social está constituida por un conjunto de conductas, capacidades y estrategias, que permiten a la persona construir su propia identidad, actuar competentemente, relacionarse satisfactoriamente con otras personas, afrontar los retos y las dificultades de la vida y valorarse a sí misma.
Conceptualizando un poco qué son las competencias personales, se puede referir que son habilidades y elementos que las personas aplican en sus actividades diarias, indistintamente de las funciones o atribuciones profesionales que requiera la empresa. Estas competencias son parte del crecimiento y del desarrollo personal de los individuos y que les ayudan a desenvolverse individualmente y de manera grupal.
Además de las competencias personales, es necesario que los trabajadores desarrollen las capacidades laborales, que junto con el conocimiento son todas aquellas aptitudes y habilidades que posee un individuo para cubrir competentemente un determinado puesto de trabajo. La competencia laboral incluye tener el conocimiento y las herramientas necesarias para poder realizar el trabajo, pero también la capacidad para llevarlo a cabo a pesar de las dificultades o contratiempos que puedan surgir.
En los últimos años, las habilidades laborales ocupan un lugar de privilegio al momento de la selección del recurso humano. Para las organizaciones es de suma importancia que los trabajadores posean formación profesional y aptitud para llevar adelante las tareas de manera exitosa; por tal motivo, la elección de las personas a incorporar se realiza de una manera muy minuciosa, evaluando los puntos fuertes y débiles de cada candidato y teniendo como meta y propósito encontrar el mejor talento humano para la empresa.
Según los tratadistas de esta área de conocimiento, los componentes claves de las competencias personales son: saber (conocimiento); saber hacer (habilidades); saber ser (actitudes), querer hacer (motivación) y poder hacer (aptitud profesional y medios), agregando que entre los componentes básicos de las competencias personales figura la motivación personal o automotivación. Es tener el impulso y el entusiasmo para lograr algo sin la supervisión o influencia de otros. Cuando un individuo está motivado, se siente más realizado y ve posible alcanzar sus objetivos.
Contar con capacidad de automotivación es una gran ventaja, ya que puede mejorar la calidad de vida, además de desempeñar un papel importante en el desarrollo profesional, la productividad e incluso la satisfacción laboral del trabajador.
Otro de los elementos básicos de las competencias personales son los rasgos de personalidad que son como patrones persistentes de modos de percibir, relacionarse y pensar sobre el entorno y sobre uno mismo que se ponen de manifiesto en una amplia gama de contextos sociales y personales; asimismo, habla de disposiciones o tendencias de la persona a comportarse en determinados momentos. También se puede decir que los rasgos son las características personales que responden a una situación.
Los cinco rasgos más comunes de la personalidad son los siguientes: Factor O: apertura a las nuevas experiencias; Factor C: Responsabilidad; Factor E: Extroversión; Factor A: Amabilidad y Factor N: Neuroticismo o inestabilidad emocional.
El autoconcepto es otro elemento importante para la reafirmación de las competencias personales. Este elemento es básicamente la imagen que tienen las personas de sí mismas. Esta imagen se conforma a partir de un buen número de variables, pero es particularmente influenciada por las interacciones con las personas importantes de vida. Incluye la percepción de las capacidades y la propia singularidad, y a medida que se envejece estas auto-percepciones se vuelven mucho más organizadas, detalladas y específicas.
El autoconcepto es un término de gran relevancia en al ámbito de la psicología social, pero fundamentalmente ha sido desarrollado por los teóricos de la psicología humanista, en cuyo seno se ha considerado como un pilar básico para el posterior desarrollo de sus diversos abordajes terapéuticos.
El conocimiento es otro elemento clave para desarrollar competencias personales positivas. Es la facultad del ser humano para comprender -por medio de la razón- la naturaleza, cualidades y relaciones de las cosas. El conocimiento es la familiaridad, la conciencia o la comprensión de alguien o de algo, como pueden ser los hechos, las habilidades o los objetos.
También se puede decir que el conocimiento es la capacidad que tiene el ser humano para identificar, observar y analizar lo que sucede en la realidad y lo utiliza para su beneficio. Entonces, se puede decir que el conocimiento está conformado por la suma de todos los datos e información y su debida aplicación.
Es el saber de las personas sobre temas específicos.
La habilidad desarrollada o adquirida es otro elemento fundamental de las competencias personales. Es la capacidad de alguien para desempeñar de manera correcta y con facilidad una tarea o actividad humana. Se trata de una manera de aptitud específica para una actividad puntual, sea de índole física, mental o social.
Comúnmente, las habilidades se entienden como talentos innatos o naturales, pero la verdad es que también pueden ser aprendidos o perfeccionados: una persona puede nacer con un talento propio para cierto deporte o puede adquirir dicha habilidad con la práctica y la ejercitación constante. En principio, entonces, la habilidad implica de algún modo el talento en potencia.
Resumiendo, se puede afirmar que una persona competente tiene el conocimiento, las habilidades y la experiencia para identificar peligros que puedan causar lesiones serias o fatalidades. Además, tiene la autoridad y responsabilidad de implementar soluciones inmediatas, como la instalación de líneas conductuales en el proyecto de vida personal.
Amigo empresario, existen organizaciones muy bien avaladas (como P.F.Consultores, nuestro aliado estratégico) con amplísima experiencia que están dispuesta a apoyarle en su andar hacia el éxito: no dude en contactar.
