17 noviembre 2016
No cabe duda de que, la conectividad ha cambiado nuestra forma de ver, entender y comunicarnos con el mundo que nos rodea pero, ¿hasta qué punto ha modificado nuestros hábitos y comportamientos digitales?
Para responder a esta pregunta, hemos asistido a la presentación del estudio "Connected Life", elaborado por Kantar TNS que analiza a nivel global, las actitudes de 70.000 usuarios digitales en 57 países con el objetivo de vislumbrar dónde se encuentran los grandes retos para los marketeros en el cambiante mundo 2.0.
Alberto Relaño, director de digital de Kantar TNS, ha sido el encargado de dar a conocer los resultados en los que queda patente el liderazgo del móvil como dispositivo predilecto de los usuarios.
Y es que, a pesar de su enorme penetración, su uso no para de crecer, sobre todo entre los más jóvenes que invierten hasta el 70% de su tiempo en este dispositivo y 5 horas diarias conectados a internet.
Además, el móvil ha generado una conexión continua por parte de los usuarios pues, el 64% de ellos está todo el día "constantemente conectados".
Una de las preocupaciones actuales para los marketeros a la hora de llegar a su target es el aumento en el uso de ad blockers. Y, en este sentido, las cifras muestran que el 18% de los usuarios los utilizan a nivel global mientras que en Europa este número asciende hasta el 30%.
Los más asiduos a utilizar estos bloqueadores de publicidad son los más jóvenes aunque también se muestran como los más receptivos a los contenidos de las marcas en redes sociales, con un 42% de ellos asegurando que les gusta ver este tipo de contenidos.
"A los europeos nos cuesta hablar con las marcas, tendemos a poner más barreras que los latinoamericanos o los asiáticos", comenta Relaño.
Es destacable la brecha digital que todavía persiste en dos campos. Por un lado, la que se produce entre mercados desarrollados y emergentes y por otro, la generacional.
Aunque, el móvil vuelve a ser protagonista en este terreno pues, gracias a él, se facilita la digitalización en los mercados emergentes y también se disminuye la brecha entre jóvenes y mayores que son cada vez más adeptos a la mensajería instantánea y a la red social Facebook.
Por su parte, el e-commerce está en boga a nivel global con un crecimiento notable en todos los sectores, incluso en aquellos considerados tradicionalmente offline como los medicamentos cuya compra por internet aumenta un 28% con respecto al año anterior mientras que las categorías de cosméticos lideran este tipo de comercio representando el 20%.
Este crecimiento se debe, principalmente, al deseo de los consumidores de ahorrar dinero, razón por la que compra online el 38% de los encuestados, seguido de su rapidez y comodidad, señalado por el 37%.
Con respecto al futuro, los usuarios demandan mayores facilidades en el proceso de compra con herramientas que permitan, por ejemplo, realizar sus pedidos en un solo clic (21%) o guardar la lista de la compra (19%).
En nuestro país, encontramos una penetración del smartphone del 94%, seguido del portátil con un 75% mientras que los wearables se quedan todavía algo rezagados con un 15%.
La penetración de tabletas sigue creciendo, a diferencia del resto del mundo en donde se ha frenado en los últimos tiempos situando a España en los 5 primeros países del mundo con mayor penetración de este dispositivo.
Destaca, además, el crecimiento de los servicios de contenidos audiovisuales de pago a través de streaming online que aumenta un 7% alcanzando una penetración del 15%; la Smart TV con un crecimiento del 6% hasta llegar al 34% o la televisión por cable que suma un 5% hasta una penetración del 30%.
La televisión, sin embargo, a pesar de que continúa siendo el medio que más penetración tiene en España, con un 80%, pierde 2 puntos.
Los wearables son todavía la asignatura pendiente para los usuarios españoles pues su penetración es baja con un 10% en los smartwatch y un 8% en las fitness band. Sin embargo, sí se ha producido un crecimiento notable, sobre todo entre los consumidores de entre 25 y 34 años.
A juzgar por las cifras, se puede decir que somos un país multidispositivo en el que los usuarios invierten ya más tiempo en los medios digitales (59%) que en los tradicionales (41%).
Cada vez son más las actividades que los consumidores realizan a través de internet, aunque el envío de emails (93%), la mensajería instantánea y las redes sociales siguen siendo las preferidas.
Además, los españoles son los más adictos al social media siendo usuarios activos en un mayor numero de redes sociales que el resto de países, con una media de 6,2 plataformas y siendo Instagram y Snapchat las que más crecen con aumentos del 12% y 9% respectivamente gracias a los más jóvenes.
Sin embargo, con respecto a estos usuarios tan perseguidos por las marcas, Relaño advierte: "Desde el punto de vista del marketing es clave segmentar por conectividad pues, de otra manera estamos asumiendo premisas sobre los millennials que no se corresponden a la realidad. Hay que derribar mitos".
El e-commerce sigue creciendo en España, presentando enormes oportunidades para las marcas en todas las categorías aunque son los viajes (77%), la música (59%) y los medios (52%), las que más acaparan los bolsillos de los usuarios.
Las razones que motivan los usuarios de nuestro país para realizar sus compras online son el ahorro de dinero (52%), la garantía de calidad (32%) y la seguridad en el pago (32%).
Ante este panorama, podemos comprobar cómo se estrecha paulatinamente la brecha digital gracias a la creciente penetración de los móviles, las enormes oportunidades que se abren para todos los sectores en el ámbito del e-commerce, el auge que han experimentado los contenidos audiovisuales de televisión de pago y la patente conectividad de los usuarios en todo el mundo que, desde luego, seguirá creciendo en los próximos años.