Traspaso de reservas tendrá un alto costo para la nación

Las reservas internacionales líquidas (efectivo y bonos) que el Gobierno decida trasladar a instituciones financieras de Brasil, tendrán que pagar un impuesto de 6%, una cifra que puede ser una carga importante dependiendo del monto que se decida depositar en ese país. Adicionalmente, China presenta serias restricciones para ser depositario de papeles por lo pequeño e ilíquido de su mercado y, además, es una economía regida por controles de capitales. Rusia cuenta con un mercado muy limitado para las transacciones con títulos.

Estas son parte de las preocupaciones de los mercados internacionales, según una fuente financiera foránea, quien advierte que al movilizar las reservas en oro a Venezuela, éstas van a perder liquidez.

«Para el BCV va a ser más difícil, en caso de que se requiera, pedir prestado con las reservas como respaldo, pues habrá menos confiabilidad sobre su certificación», dice, y agrega que de ser necesario el prestamista no podrá exigir su colateral.

Reservas no alcanzan.

Ayer en la Asamblea Nacional el ministro de Planificación Finanzas, Jorge Giordani, y el presidente del Banco Central de Venezuela, Nelson Merentes, expusieron los criterios que determinaron el traspaso de las reservas internacionales.

No obstante, los legisladores no pudieron hacer preguntas directas a los funcionarios.

Giordani abrió su intervención afirmando que no ha habido «ningún gobierno que le haya dedicado 400 millardos de dólares al ser humano», e indicó que se han asignado 80 millardos de dólares al Fondo de Desarrollo Nacional. Sin embargo, esta cifra fue refutada por el diputado Carlos Ramos, de Primero Justicia, quien le señaló que los números no cuadran con lo informado por el ministerio a la Asamblea, donde se especifica que se han utilizado 37 millardos de dólares para el financiamiento de proyectos. «No tenemos ningún punto contrario a que el oro sea depositado en Venezuela, nuestra preocupación es que todo lo que ustedes tocan desaparece».

Merentes afirmó que el traslado de las reservas pretende resguardar los ahorros de la nación de la crisis que comenzó en Estados Unidos y ahora afecta la zona euro. «Tenemos 63% de las reservas en oro y esta es una buena decisión; pues luego se pueden utilizar cuando estén por encima del nivel y transferirlas al Fonden».

Añadió que de ocurrir una recesión mundial «¿dónde van a estar mejor cuidadas que en nuestro país? En la bóveda del Banco Central de Venezuela».

Con relación al efectivo aseguró que será colocado en diferentes bancos para diversificar el riesgo.
El diputado Luis Acuña, del PSUV, leyó un comunicado en el que expresaba el total apoyo de la bancada oficialista para el traslado de las reservas. Luego Vestalia Sampedro de Araujo, de Proyecto Venezuela, se refirió a que las reservas operativas que suman un poco más de 6 millardos de dólares, sólo alcanzan para «escasamente dos meses de importaciones».

Diosdado Cabello, también del PSUV, se preguntó: «Por qué se oponen a que regrese nuestro oro a Venezuela ¿Qué hay detrás de esto?».

El diputado Leomagno Flores, de Acción Democrática, dijo en su intervención que fueron los técnicos del BCV, los que filtraron el punto de cuenta que difundió el diputado Julio Montoya. «Se lo dieron a él y yo felicito a los técnicos del Banco Central por el favor que le hicieron a la opinión pública. No se someten a los deseos de Chávez ni a los ideológicos».

Aseguró que la verdadera razón para trasladar las reservas, es para transformar el oro en dólares y financiar la campaña electoral.

El ministro Giordani calificó a la oposición de «esperpentos de la historia y nunca más van a gobernar al país». Dijo que la inteligencia de los diputados «la tienen abajo en el piso».

También tildó a los legisladores de «antipatriotas», mientras la bancada oficialista gritaba «No volverán».

Fuente: http://www.el-nacional.com/www/site/p_contenido.php?q=nodo/230363/Econom%C3%ADa/Traspaso-de-reservas-tendr%C3%A1-un-alto-costo-para-la-naci%C3%B3n