No siempre existe una perfecta alineación del talento humano con las estrategias corporativas; en consecuencia, se hace necesario el rediseño y ejecución de una nueva estrategia que garantice el logro de las metas y objetivos organizacionales.
Ch. Páez
¿Qué es el talento humano? Se puede entender al talento humano como la sumatoria de competencias y habilidades de una persona. Generalmente, estas características son las que le permiten un crecimiento organizacional y un valor agregado en el trabajo.
¿Qué es la gestión del talento humano?
La gestión del talento humano hace referencia al proceso que desarrolla, atrae e incorpora nuevos integrantes y -además- retiene a los colaboradores más sobresalientes dentro de las empresas. La gestión del talento humano se centra en destacar a aquellas personas con un alto potencial dentro de su puesto de trabajo.
También se le venía conociendo como gestión del capital humano o gestión de recursos humanos. Este enfoque del manejo del factor humano de una organización busca no sólo emplear a la gente más calificada y valiosa, sino también se concentra en la retención de los mejores.
¿Por qué? Pues la razón es bastante simple. Dado que los procesos de reclutamiento y selección, de desarrollo y capacitación son tan costosos para una empresa es muy importante colocar al individuo en una posición donde sus habilidades sean óptimamente utilizadas.
¿Qué es la estrategia corporativa?
La estrategia corporativa de una empresa permite diseñar un plan específico en el que se definen las acciones que se deben ejecutar para crecer y desarrollarse de manera satisfactoria a lo largo del tiempo. Dicho de otra manera, es la ruta o guía que se debe seguir para alcanzar las metas formuladas y el objetivo propuesto.
Aunque se pueda pensar que se trata de algo que solamente deben poseer las grandes corporaciones, la realidad es que cualquier tipo de organización e independientemente de su tamaño debería tener una estrategia bien definida, ya que esta permite:
Conocer mejor y mantener el foco en el mercado en el que opera la empresa.
Saber cómo deben ser los productos (bienes y/o servicios) para satisfacer las necesidades del segmento de clientes al que se dirige.
Establecer cuáles acciones resultan más rentables.
En definitiva, confecciona una visión completa de todo lo que hay que realizar a medio y largo plazo, así como los puntos que se deben potenciar para alcanzar las metas y objetivos establecidos.
La alineación del talento humano con la estrategia muestra que las acciones de gestión organizacional permiten que el factor humano se dirija como un conjunto unificado a los objetivos estratégicos que la organización quiere conseguir. En una sola palabra: se pretende que todos los vectores energéticos y operacionales tengan unidireccionalidad hacia el objetivo estratégico.
No siempre ocurre una alineación casi total entre el talento humano y la estrategia corporativa; por tal motivo, se hace necesario que los niveles estratégicos organizacionales -responsables de delinear el plan filosófico de la empresa- rediseñen y ponga en práctica algunas políticas que coadyuven a lograr tal alineamiento. Entre ellas se pueden mencionar las siguientes:
1.- Establecimiento de metas individuales, para fomentar la internalización de cómo el esfuerzo de cada empleado colabora con la consecución de las metas y objetivos de la empresa.
Los objetivos individuales, por su parte, son aquéllos que cada persona debe cumplir por sí misma a través de las tareas asignadas correspondientes a su puesto en la empresa y que tengan total pertinencia y coherencia con los corporativos.
Establecer metas -tanto personales, como profesionales- ayudará a crear una estructura y un camino hacia el éxito. Muchos empleadores valoran a los candidatos que tienen un historial de establecer y lograr metas. Esto demuestra que puede ser un empleado enfocado y orientado al objetivo y que debe tener una visión futurista de su desarrollo personal y el de la empresa.
2.- Creación de equipos multifuncionales. Los equipos multifuncionales reúnen a empleados con diferentes especialidades profesionales para crear un conjunto que pueda manejar tareas en múltiples departamentos, Se trata de la capacidad de realizar distintas actividades al mismo tiempo, algo así como caminar y mascar chicle, pero esta vez enfocado al mundo laboral.
Estos equipos multifuncionales garantizan el pensamiento holístico de todos los integrantes de la estructura informal de la organización. Así como también los equipos multifuncionales reúnen a empleados con diferentes áreas de experiencia para trabajar hacia un objetivo común. El desarrollo exitoso de un equipo multifuncional garantiza que el conjunto adopte un enfoque organizado y cohesivo de los proyectos.
3.- Los procesos comunicacionales tienen que ser: claros, correctos. concretos y concisos de la estrategia organizacional. Sin importar si la comunicación es verbal, corporal, escrita o audiovisual, es importante asegurarse de que el mensaje llegue correctamente a la audiencia, ya sea en términos de la organización o a nivel personal.
En este aparte se debe prever el recordatorio frecuente de los componentes claves de la planificación estratégica, como son: misión, visión, metas y objetivo, y la importancia que el comportamiento de los trabajadores esté orientado a la consecución exitosa de todo esto.