El futuro de los establecimientos al detal está como la mayoría de las cosas en Venezuela, dependiendo de las decisiones gubernamentales. La evolución de la política cambiaria, monetaria, fiscal y las políticas de importación normarán el futuro crecimiento de este tipo de organizaciones.
Mientras en Venezuela se mantenga la escasez, las estrategias de diferenciación de los establecimientos detallistas desaparecerán; debido a que, no podrán garantizar ni la disponibilidad ni la variedad de productos a la cual nos tenían acostumbrados. Menos aún, suministrar una calidad de servicio efectiva. Por tanto, se puede afirmar que la escasez es contraria a la calidad de vida de la población. Solo proveen marcas similares a las otras tiendas y, en ocasiones, de marcas nunca vistas por los consumidores venezolanos.
En esas condiciones de funcionamiento, la conducta de este tipo de negocio es limitar o reducir la expansión de las tiendas, por los obstáculos que significa operar las tiendas existentes. Entre los principales obstáculos se perciben, entre otros: i) la acentuada escasez de productos; ii) la reducción de marcas por categoría de productos; iii) los costos laborales y; iv) el desorden y los daños que sufre el establecimiento como consecuencia del desespero de los compradores que, en ocasiones, generan disputas personales por entrar a los establecimientos. Como resultado, algunas tiendas han cerrado temporalmente, mientras que otras se han ido y otras han cerrado definitivamente.
Esa reducción de los negocios detallistas ha generalizado la popularidad de panaderías y farmacias, las cuales se han incorporado al suministro de otros productos tales como Farmatodo, Locatel y otros, los cuales están convenientemente ubicados en sitios de alto tráfico, limitando el potencial de crecimiento de otro tipo de tiendas, como las de conveniencias.
En el pasado relativamente reciente, las cadenas grandes que venden principalmente productos importados, contaron con asistencia gubernamental de manera más rápida y completa, al enfrentarse a la continua escasez de productos. No obstante, al llegar la escasez extrema el fin de año pasado, el aparato gubernamental implementó el programa de ¨precios justos¨ en todos los canales detallistas, ocasionando de forma recurrente visitas de funcionarios oficiales obstaculizando significativamente su accionar.
De manera que pudiéramos concluir, que el futuro de este tipo de establecimiento está como la mayoría de las cosas en este país, muy ligado a las decisiones gubernamentales. La evolución de la política cambiaria, monetaria, fiscal y las políticas de importación normarán el futuro crecimiento de este tipo de organizaciones. La forma de proveer de productos e insumos a los fabricantes nacionales es una condición para incrementar la oferta, la competencia, impulsar la innovación y atraer nuevos actores.
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