Siempre se ha dicho que las mujeres son más fieles que los hombres, pero ¿se aplica también este tópico a las marcas? A esta pregunta ha tratado precisamente de responder Stijn van Osselaer, profesor de marketing de la Universidad Erasmus de Rotterdam en Holanda.
Y la respuesta es que tanto los hombres como las mujeres son fieles, pero de manera diferente. Mientras los hombres tienden a ser leales a determinadas empresas y marcas, las mujeres prefieren mostrar su lealtad a las personas que ponen voz y rostro a un producto o servicio. De esta manera, un hombre sería fiel, por ejemplo, a una peluquería, y una mujer al peluquero que trabaja en esa peluquería, informa Absatzwirtschaft.
“Independientemente del género, todos tenemos necesidad de pertenencia”, explica Osselaer. Pero esta necesidad de pertenencia se proyecta en direcciones diferentes. Las mujeres prefieren la interacción con individuos, los hombres con grupos.
Las conclusiones del informe del profesor Osselaer pueden ser de gran utilidad a las empresas a la hora de desarrollar estrategias para conectar con su público objetivo. Así, los anunciantes deberían tratar a las mujeres como personas individuales y promover con ellas un diálogo directo “tú a tú”. Igualmente, deberían tener en cuenta que el vínculo que una cliente crea en ocasiones con la persona que pone cara a una marca es tan fuerte, que si el empleado al que ésta es fiel abandona la empresa, es muy probable que la empresa pierda también una cliente.
“Hoy por hoy son muy pocas las tiendas de ropa para hombres que cuentan únicamente con uno o dos dependientes”, apunta Osselaer. Sin embargo, las boutiques femeninas apuestan mucho más por las fórmulas personalizadas en la relación con sus clientes, añadió.
Fuente: www.marketingdirecto.com