En el desarrollo de nuestra actividad laboral o empresarial, nos encontraremos con empresas donde la cultura organizacional se dio de abajo hacia arriba, por falta de capacidad o corrupción de los dirigentes de turno y situación que propiciara una serie de problemas a la organización; y consecuentemente, al medio al cual está dirigida, teniendo dentro de las mismas, robos, mal uso de los fondos, así como también recursos y resultados poco menos que mediocres, sin dejar de lado que buenos trabajadores son marginados por no entrar en el festín.
Esta situación mayormente se da en entidades sin fines de lucro o empresas familiares, mismas que en la medida de su tamaño, el daño será mayor o menor.
En el caso de las empresas familiares, si su directiva toma conciencia y se asesora con especialistas, definitivamente puede superar esta situación en forma rápida y fácil.
En el caso de las entidades sin fines de lucro, ONG’s, Universidades, instituciones, etc. El daño será más severo, ya que la mayoría del personal estará de forma directa o indirectamente involucrado en situaciones que perjudican a la entidad, y el hecho de cambiar a sus principales directivos no asegurará un cambio positivo en la organización, ya que el personal subalterno se mostrará reacio a cambios que sean contrario a lo que estuvieron involucrados y acostumbrados directamente.
Es necesario, en estos casos específicos, ubicar en la misma, a personal de confianza con un tiempo prudencial, antes de tomar acciones para hacer un análisis profundo de la organización y ubicar a los líderes y, una vez detectados, proceder con la reorganización.
(*) M.B.A. Asesor empresarial
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